Comienza juicio oral contra militares peruanos por matanza de 1986


Lima. - La Justicia peruana comenzó hoy el juicio oral contra 34 militares en retiro por las presuntas ejecuciones extrajudiciales de 133 presos, cometidas en 1986 durante un motín organizado por condenados o procesados por supuesta militancia en el grupo armado ultraizquierdista Sendero Luminoso.



Presos en la cárcel del Frontón en 1986
Presos en la cárcel del Frontón en 1986
La Fiscalía pide entre 25 y 30 años de prisión contra los supuestos autores materiales de los asesinatos perpetrados, según diversas investigaciones, por miembros de la Marina cuando los reos ya estaban sometidos e indefensos. 
En la audiencia están presentes varios de los acusados, entre ellos el capitán de fragata en retiro Héctor Lazo Galliani, a quien se acusa de haber estado al mando de la operación cumplida en la cárcel El Frontón, ubicada en la isla homónima frente a las costas de Lima. 
Durante el proceso, el tribunal citará como testigo al entonces presidente Alan García (1985-1990) y miembros de su equipo ministerial, como Luis Gonzales Posada, Manuel Romero Caro, Remigio Morales Bermúdez y José Murgia. 
"Estamos a 31 años de los hechos. No es bueno que un juicio se realice tanto tiempo después porque va contra las posibilidades de hacer un juicio eficiente, pues se mueren los acusados o los testigos", criticó el abogado de las familias de las víctimas, Carlos Rivera, en entrevista con dpa. 
Rivera, uno de los más connotados abogados del Perú en materia de derechos humanos, se manifestó a favor de que durante o después del proceso contra los marinos, la Fiscalía impulse otro contra los supuestos autores mediatos de la matanza, entre ellos el propio García. 
El jurista sostuvo que el caso es emblemático porque militares y sus aliados han hecho todos los esfuerzos para evitar que se desarrolle el juicio y se castigue a los responsables. 
"Se han implementado todos los mecanismos de impunidad. Hablo de intervenciones de la política, leyes de amnistía y de la (actuación de la) Justicia militar. La combinación de todos estos elementos es una de las más importantes razones por las que el caso se ha demorado tanto en llegar a un juicio", explicó Rivera. 
El 19 de junio de 1986, los reos condenados o procesados por pertenecer al grupo maoísta fundamentalista iniciaron un motín que se prolongó por dos días y que terminó con la intervención de la Marina, con jurisdicción en la zona. 
Según diversos testimonios, los comandos de la Marina lograron sofocar la revuelta, pero luego hicieron disparos de gracia contra los reos.
Viernes, 8 de Septiembre 2017
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
           


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