"Cinco soldados de la ISAF murieron en un ataque insurgente en el este de Afganistán" el sábado, indicó un comunicado de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN.
Un portavoz de la ISAF, el comandante Tim James, confirmó a la AFP que se trató de un atentado suicida contra el cuartel general del ejército afgano en el este del país, situado en la zona de Gambiri, cerca de Jalalabad, importante ciudad del este de Afganistán.
Por su parte, el ministerio de Defensa confirmó que "cuatro militares afganos murieron y ocho resultaron heridos" en el atentado.
Según el ministerio, el atentado fue realizado por un kamikaze que llevaba un uniforme del ejército.
Un centenar de militares de la ISAF, que se dedican principalmente a asesorar al ejército afgano, permanecen en esta base de la provincia de Laghman, según James.
Un portavoz de los talibanes, Zabihulah Muyahid, con quien tomó contacto la AFP, reivindicó el atentado, uno de los que han causado más víctimas de la OTAN desde que las fuerzas internacionales lideradas por Estados Unidos entraron en Afganistán en 2001.
Este ataque es el décimo atentado suicida desde principios de abril en Afganistán y el quinto en tres días contra fuerzas de seguridad afganas o de la OTAN.
El viernes, un kamikaze accionó su carga explosiva tras haber logrado penetrar en el cuartel general de la policía en Kandahar, principal ciudad del sur afgano, matando al jefe de la policía provincial y a dos de sus guardaespaldas.
El 12 de diciembre, seis militares de la OTAN murieron en un atentado en el sur de Afganistán.
En Jalalabad, tuvo lugar el 19 de febrero uno de los ataques más mortíferos de los últimos años en Afganistán. Varios kamikazes tomaron el control de un banco al que venían policías a cobrar sus sueldos. Treinta y ocho personas murieron y más de 70 resultaron heridas.
La OTAN tiene previsto transferir a las fuerzas afganas la responsabilidad de mantener el orden y la seguridad en el territorio de Afganistán entre julio próximo y fines de 2014.
Unos 132.000 soldados de la OTAN apoyan al gobierno de Kabul ante la insurrección de los talibanes, quienes fueron derrocados en 2001 por las fuerzas internacionales.
Los atentados suicidas y la colocación de bombas caseras al borde de las carreteras son los principales tipos de acción que llevan a cabo los insurrectos, que atacan ante todo a policías y militares, tanto afganos como de la OTAN, pero también provocan la muerte de numerosos civiles.
La secretaria de Estado estadounidense Hillary Clinton estimó el jueves que una retirada precipitada de las fuerzas de la OTAN de Afganistán podría terminar favoreciendo a los talibanes.