Los insurgentes talibanes reivindicaron inmediatamente estas dos explosiones, realizadas en hora punta cuando los empleados salían del complejo legislativo.

"La primera explosión tuvo lugar frente al parlamento (...) varios empleados inocentes murieron o resultaron heridos, fue efectuada por un suicida a pie", declaró a la AFP un guardia de seguridad del edificio, identificado como Zabi, que resultó herido.

"La segunda fue un coche-bomba, que estaba aparcado al otro lado de la carretera y que me arrojó hacia atrás cuando detonó", agregó.

La mayoría de las víctimas son civiles y entre ellos empleados del parlamento, declaró a la AFP un responsable de seguridad que pidió el anonimato.

Otro responsable de seguridad afirmó que la doble explosión provocó "decenas de muertos".

Unas 70 personas fueron trasladadas a los hospitales de la capital afgana, declaró a la AFP un portavoz del ministerio de Salud.