AFP (Agencia France-Presse)
BOGOTÁ. - El alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, dijo en una entrevista con la AFP que su destitución podría afectar los diálogos de paz con las FARC y que el presidente, Juan Manuel Santos, tiene en sus manos el problema.
"El presidente es el que tiene en sus manos la solución al problema", afirmó el alcalde, que el lunes fue destituido y suspendido de la actividad política por 15 años por dolo en la reforma del sistema de recolección de residuos, en un fallo de primera instancia de la Procuraduría.
"Si aplicásemos la Constitución, ese es el camino", aseguró en alusión a un artículo de la Carta Magna que señala que es el primer mandatario quien puede destituir al alcalde de la capital.
La Presidencia llamó el lunes a las autoridades y los ciudadanos "a conservar la serenidad" y dijo que "respeta la decisión de la Procuraduría General de la Nación, así como los recursos que a bien tenga interponer y a los que tiene derecho el señor Alcalde".
En un momento en que el gobierno de Santos negocia, desde hace más de un año en Cuba, un acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC, Petro señaló que la decisión del procurador afecta los diálogos.
"Es un mensaje que busca sabotear la posibilidad de que se acabe la guerra", señaló Petro, un ex guerrillero del M-19, que se desmovilizó, entregó las armas y comenzó una carrera política: fue congresista y luego alcalde.
"Es un mensaje directo para La Habana y así ha sido captado, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) están sintiendo que las están engañando", señaló aludiendo a eventuales temores que podrían albergar los guerrilleros que se levantaron en armas hace cinco décadas.
"Soy la demostración de que la paz es posible, de que en el sentido de que la gente que dejó las armas podría acceder pacíficamente al poder", dijo.
Estimó que en un momento en el cual el gobierno y la guerrilla comunista de las FARC han acordado dos puntos de una agenda de cinco -la reforma agraria y la participación política-, la decisión de la Procuraduría podía enviar una señal de que no existen garantías.
En este sentido, Petro destacó la afirmación del nuevo embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin Whitaker, quien dijo el miércoles que esta decisión podría "erosionar el proceso de paz".
Las FARC calificaron la destitución de Petro de "grave golpe" a las conversaciones de paz.
El alcalde de Bogotá todavía no ha recibido oficialmente la notificación de su destitución, por lo que tiene un plazo máximo hasta el próximo miércoles para presentar un recurso ante la misma Procuraduría.
De forma paralela, puede acudir a otras instancias judiciales para pedir la nulidad de la destitución, en tanto ya inició un proceso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Un "Bogotazo" pacífico
Petro fue destituído en primera instancia por el procurador, Alejandro Ordóñez, que dirige el órgano de control de los funcionarios, bajo el argumento de que actuó con dolo en la reforma del sistema de recolección de basura, que pasó de la órbita privada a la pública.
La transición entre los dos modelos provocó a fines de 2012 una crisis y una acumulación de los desechos durante varios días en Bogotá, un ciudad de más de 7 millones de habitantes.
Para Petro, la cuestión radica en que no se puede destituir a un funcionario por un error, en relación a las posibles fallas en la implementación del nuevo modelo de eliminación de residuos, que defiende como un cambio de fondo.
"Sancionar no es necesariamente destituir y mucho menos quitarle el derecho político", afirmó, agregando que existen sectores que tenían tomada la decisión de sacarlo de su cargo antes de que asumiera y que siguieron su gestión atentamente para detectar cada error que cometiera.
Según Petro, hay intereses políticos del procurador detrás, pero también está la figura del expresidente Alvaro Uribe, un fuerte detractor de los acuerdos de paz. "Ellos están en común acuerdo", comentó.
"El procurador tiene aspiraciones presidenciales y cree que usando el poder relativo que tiene al frente de una institución que no es judicial, está tratando de eliminar a rivales posibles", explicó el edil.
Sin embargo, Petro considera que la decisión del procurador, involuntariamente lo está beneficiando.
"Él mismo me está empoderando", dijo en relación a las miles de personas que se han movilizado en las calles para protestar contra su destitución.
Desde el lunes, los manifestantes han acampado en la céntrica plaza donde se encuentra la alcaldía y planean para el viernes una gran movilización para la cual prevén la llegada de delegaciones indígenas y representantes de otros departamentos.
"Ya hay un Bogotazo muy pacífico y pacifista, hay un florecimiento del ánimo democrático", dijo Petro aludiendo a históricas protestas en Bogotá luego del asesinato de un líder político en 1848.
"El esfuerzo tiene que ser defender el gobierno electo popularmente, si se extiende a nivel nacional el esfuerzo tiene que ser defender la paz. Nosotros no tenemos un momento en la historia en el que hayamos vivido en paz", dijo el alcalde.
"Esa alternativa no se la quiero dejar a mis hijos", concluyó.