Explicó que tales acciones tienen por objetivo no sólo destruir los valores morales de la sociedad, sino también provocar desórdenes que harían peligrar la seguridad de los moscovitas y de los visitantes de la capital.
"En primer término, ese desfile amenazaría a la seguridad de los propios participantes", señaló el portavoz.
Según comentó, es la postura no sólo del gobierno de Moscú sino también de todas las confesiones religiosas, y ante todo, de la Iglesia Ortodoxa Rusa y de las organizaciones juveniles y de veteranos", subrayó Tsoi.
"Cualquier intento de realizar en Moscú acciones no autorizadas será castigado duramente por las fuerzas del orden tal como establece la ley", advirtió el portavoz de la alcaldía de Moscú.
Desde hace años, los representantes de las minorías sexuales se proponen desfilar por Moscú, pero las autoridades urbanas siempre lo prohíben.