El miércoles, los ministros del Interior de los Länder (Estados regiones) se pronunciarán sobre esta iniciativa y el jueves será el turno de los jefes de los gobiernos regionales que, basándose en la primera opinión, decidirán si lanzan o no el procedimiento ante la Corte Constitucional de Karlsruhe, la única habilitada a fallar sobre la prohibición de un partido.
Durante una rueda de prensa regular, el portavoz del gobierno federal, Steffen Seibert, se mostró prudente. "Un procedimiento de prohibición semejante tiene posibilidades (de tener éxito), pero también presenta riesgos", afirmó.
En 2003 fracasó un intento precedente, pues la Corte Constitucional consideró que la presencia de agentes infiltrados de los servicios de inteligencia interior (Verfassungsshutz) dentro de las estructuras dirigentes del NPD afectaba a su capacidad de decisión.
La idea de prohibir al NPD volvió a surgir después del descubrimiento en 2011 de una organización criminal de extrema derecha, Clandestinidad Nacionalsocialista (SU). Miembros de este grupúsculo, vinculados al NPD, fueron acusados de haber asesinado por xenofobia a diez personas, en su mayor parte de origen turco, entre 2000 y 2006.
El NPD existe desde 1964 y obtuvo 1,5% de los votos en las legislativas de 2009. Jamás entró al Bundestag (la cámara baja), cuyo acceso requiere un mínimo de 5% de los votos. Está representado en dos Parlamentos regionales de la ex Alemania del Este.