AFP (Agencia France-Presse)
BUENOS AIRES. - El ministro de Economía argentino, Axel Kiciloff, advirtió el martes que la decisión adversa de la justicia de EEUU que la obliga a pagar deuda en quiebra a fondos especulativos busca "tirar abajo" la reestructuración acordada con acreedores y empujaría al país a una quiebra.
"Mi impresión es que quieren tirar abajo la reestructuración de la deuda argentina", dijo el ministro en una conferencia de prensa para explicar la estrategia del país en relación a la decisión del máximo tribunal estadounidense que convalidó una sentencia de un tribunal inferior el lunes.
Según Kicillof "si la Argentina se viera obligada a pagar a los fondos buitres, el país sería empujado a un defalut", y aclaró: "No estamos dispuestos a negociar bajo cualquier condición".
Por el momento no aclaró cómo el país cumplirá el fallo del tribunal neoyorquino convalidado por el máximo tribunal estadounidense, que dejó firme una sentencia por la cual Argentina tiene que pagar el 100% de 1.330 millones de dólares a los fondos especulativos NML Capital y Aurelius.
Sí especificó que se reunirá con los líderes del Congreso para plantear la visión del gobierno y las eventuales salidas al problema, que no detalló.
Argentina puede solicitar a la Corte Suprema de Estados Unidos una revisión del fallo, que puede servirle para ganar algo de tiempo, aunque no todo el que necesita para que caiga la cláusula que vence el 31 de diciembre y la compromete a extender cualquier oferta más ventajosa al 93% de los acreedores que entraron a los canjes de 2005 y 2010.
El resto de los acreedores que no litigaron (7% de bonistas) también podrían reclamar el mismo tratamiento y elevaría la demanda a unos 15.000 millones de dólares, más de la mitad de las reservas del Banco Central estimadas en 28.500 millones de dólares.
Este revés se produce en un momento delicado de la economía argentina, que intenta acceder al mercado de capitales luego de los recientes acuerdos con Repsol, el Club de París y de haber tomado medidas monetarias, entre otras, para dar señales positivas a potenciales inversores.
- Pagar sí, "extorsión" no -
El fallo alimentó los temores de que Argentina caiga en un "default técnico" porque los demandantes podrían obtener órdenes de embargos sobre fondos que el país transfiere a Nueva York para pagar su deuda lo que le impediría pagar a los bonistas con quienes tiene acuerdos de reestructuración.
S&P bajó la nota de la deuda argentina este martes tras la decisión en EEUU.
"Argentina no va a defaultear su deuda reestructurada y tiene voluntad de negociación, lo que no tiene es voluntad de ser sometida a extorsión", sostuvo Cristina Kirchner el lunes.
Kirchner ratificó que Argentina honrará sus compromisos con los acreedores que esperan cobrar unos 900 millones de dólares el próximo 30 de junio con el Banco de Nueva York como agente de pago.
No obstante, los líderes opositores e incluso los políticos que se perfilan como eventuales candidatos a la Presidencia para las elecciones de octubre de 2015 hicieron votos porque el gobierno negocie un plan de pagos y evite la confrontación.
"Hay que dejar los extremos y no hablar de extorsión", opinó el ex ministro de Economía Roberto Lavagna, quien reclamó mesura al gobierno y le recomendó "explorar todos los mecanismos, ganando tiempo", pero "dejándo de lado la idea de desconocer la deuda".
En este país fuertemente polarizado en política se produjo una suerte de unión nacional contra los fondos especulativos.
"Se ha logrado una respuesta del espacio político de manera unida en defensa del interés nacional porque ratifica la idea de que la soberanía descansa en un país que no está endeudado y que no depende de los criterios de los mercados", dijo el economista Aldo Ferrer, cercano al oficialismo.
- Otras salidas -
Otra posibilidad es que Argentina pida un cambio de jurisdicción para cumplir con los pagos soberanos y evitar el llamado 'default técnico'.
"Un cambio de jurisdicción sería un error importante y sólo agravaría las cosas", advirtió a la prensa el exsecretario de Finanzas Guillermo Nielsen.
Nielsen sostuvo que la estrategia del gobierno representa "una decisión de Estado que va a tener implicancias en los próximos dos o tres gobiernos de Argentina".
El legislador del PRO (derecha) Federico Sturzenegger, advirtió que "las puertas están cada vez más cerradas", pero si Argentina "mostró voluntad de pagar, tal vez eso sirva para comenzar una negociación con el juez" de Nueva York.
Para el economista Ramiro Castiñeira "hay instancias para discutir la metodología de pago porque pueden aceptar parte en bonos y los organismos internacionales pueden ayudar a pagar con deuda barata".