Yolanda Ordaz de la Cruz es el segundo periodista de Notiver, uno de los diarios populares de Veracruz, asesinado en poco más de un mes y el cuarto en México este año. Su familia reportó su desaparición la tarde del domingo y las autoridades investigaban el caso como un secuestro.
El cadáver fue hallado en la madrugada del martes detrás de la sede de Imagen, otro periódico local. Una fuente policial dijo a la prensa que aparentemente fue degollada.
La veterana periodista trabajaba hasta hace poco bajo las órdenes de Miguel Ángel López, editor policial de Notiver asesinado en junio junto a su esposa y un hijo de 21 años por un comando que irrumpió en su vivienda de la ciudad portuaria de Veracruz, situada sobre el Golfo de México.
El procurador (fiscal) del estado de Veracruz, Reynaldo Escobar, aseguró que las primeras pistas apuntan a que el homicidio de la periodista fue cometido por un grupo criminal por razones ajenas a su trabajo.
"El gobierno de Veracruz condena y lamenta el crimen y ratifica su decisión de investigar las causas del mismo, pero es fundamental dejar en claro que este tipo de hechos deplorables nada tiene que ver con el ejercicio de la profesión de periodista", señaló Escobar señalando que al lado del cadáver se encontró un mensaje escueto: "También los amigos traicionan".
El funcionario agregó que en Veracruz "se investigan las versiones que señalan la presunta relación de comunicadores con la delincuencia organizada, lo que los coloca en una situación sumamente vulnerable".
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que agrupa a dueños de diarios del continente, condenó el asesinato y reclamó a las autoridades una pronta investigación señalando que la reportera había sido amenazada en forma indirecta con mensajes en cadáveres y en videos en Youtube, en los que se sugería que estaba vinculada al cartel de Los Zetas.
La SIP recordó que en la mayoría de los diez asesinatos de periodistas ocurridos en Veracruz desde 2003 las autoridades aseguran que se trataría de crímenes no vinculados a su profesión, pero nunca han informado del resultado de las investigaciones ni detenido a los responsables.
Por su parte Article 19, una ONG con sede en Londres que defiende la libertad de expresión, llamó a las autoridades a "que no desestime dentro de la averiguación previa la línea de investigación que el homicidio fue motivado por su desempeño profesional".
Article 19 además pidió "que se ofrezcan medidas de seguridad a los familiares y al personal de Notiver para que continúen la labor periodística".
La Comisión Nacional de Derechos Humanos de México, un organismo oficial pero autónomo, deploró en un comunicado "la violencia contra los comunicadores" y exigió una "indagatoria eficaz" para "terminar con la impunidad de que es víctima el gremio" periodístico.
La periodista asesinada "tenía 28 años en el medio. Siempre cubrió la sección policíaca. Era una mujer fuerte, como todos los (reporteros) policíacos, nunca le temía a nadie, siempre esperando la noticia", señaló a la AFP uno de sus colegas en Notiver que pidió el anonimato.
El estado de Veracruz, especialmente el puerto del mismo nombre y la zona norte, ha sido escenario de distintas balaceras en las últimas semanas que las autoridades atribuyen al crimen organizado y en especial al cártel de Los Zetas.
México es el país de América más peligroso para la prensa según la ONU, que en un reporte entregado el mes pasado por el relator para la libertad de expresión contabilizó en la última década 66 periodistas asesinados y 12 desaparecidos.