Aumentan a 71 los muertos por disturbios en Myanmar
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Rangún. - Una serie de enfrentamientos entre la minoría musulmana de los rohingya y la Policía dejó al menos 71 muertos en Myanmar (antigua Birmania), informaron hoy las autoridades. Según estas fuentes, unos 150 milicianos rohingya atacaron en la noche del jueves 24 comisarías de Policía en la región de Rakhine, en el oeste del país del sudeste asiático.
En los ataques coordinados con bombas de fabricación casera murieron tanto miembros de las fuerzas de seguridad como rohingya.
La mayor parte de la población de Myanmar es budista, pero el país cuenta con una minoría musulmana, los rohingya, que denuncia una constante discriminación por parte del Estado.
En la región de Rakhine volvió a escalar desde octubre del año pasado un conflicto entre grupos étnicos que ya dura 70 años. El detonante fue una información del Gobierno según la cual los musulmanes habían matado a nueve policías en un ataque. El Ejército rodeó entonces la zona junto a la frontera con Bangladesh. Según cifras de abril, al menos 70.000 rohingya han huido allí de los combates.
En Rakhine viven más de un millón de rohingya que no son reconocidos como ciudadanos por el Estado, sino como inmigrantes ilegales procedentes de Bangladesh.
Naciones Unidas ha alertado de posibles atropellos a los derechos humanos como violaciones masivas y asesinatos en la zona que está cercada por el Ejército.
La mayor parte de la población de Myanmar es budista, pero el país cuenta con una minoría musulmana, los rohingya, que denuncia una constante discriminación por parte del Estado.
En la región de Rakhine volvió a escalar desde octubre del año pasado un conflicto entre grupos étnicos que ya dura 70 años. El detonante fue una información del Gobierno según la cual los musulmanes habían matado a nueve policías en un ataque. El Ejército rodeó entonces la zona junto a la frontera con Bangladesh. Según cifras de abril, al menos 70.000 rohingya han huido allí de los combates.
En Rakhine viven más de un millón de rohingya que no son reconocidos como ciudadanos por el Estado, sino como inmigrantes ilegales procedentes de Bangladesh.
Naciones Unidas ha alertado de posibles atropellos a los derechos humanos como violaciones masivas y asesinatos en la zona que está cercada por el Ejército.