"Si prohibiéramos los mensajes personales se provocaría el fin de (las comunicaciones para) las empresas, los comercios, los bancos, internet", declaró el coodirector general del grupo canadiense Research in Motion (RIM, fabricante del BlackBerry), Mike Lazaridis, en una entrevista con The New York Times.
Estas declaraciones surgen un día después de que Arabia Saudita suspendiera varios servicios de los BlackBerry, y que los Emiratos Árabes Unidos anunciara la intención de hacer lo mismo en octubre.
Estos países del Golfo aducen que la compañía no cumplió con sus exigencias de seguridad en los servicios de mensajería y exigen poder vigilar los teléfonos multimedia del fabricante canadiense.
El gobierno indio, quien también evoca los problemas de seguridad nacional y la dificultad de un "monitoreo del BlackBerry", amenazó recientemente con prohibir ciertos servicios de los aparatos de RIM en su país, uno de los mercados más atractivos del mundo.