"Hemos sido muy pacientes, muy tolerantes contra esta agencia norteamericana de conspiración ideológica y política y no vemos un cambio de actitud, y eso tenemos que lamentar", dijo el vicepresidente Alvaro García, en una breve rueda de prensa en La Paz.
García agregó: "hemos esperado un cambio de actitud del gobierno norteamericano y de USAID, pero claramente ellos mantienen este actitud conspirativa".
El presidente Evo Morales amenazó a principios de mes con expulsar del país al programa norteamericano, que apoya anualmente con unos 100 millones de dólares varios planes sociales.
Según La Paz, al menos dos conflictos sociales fueron empujados por USAID o por organizaciones no gubernamentales ligadas a ella.
En septiembre de 2008 el presidente Evo Morales expulsó al embajador estadounidense acusándolo de haber apoyado un supuesto complot de la derecha. Washington, que negó los cargos, actuó en reciprocidad y sacó al representante boliviano.