Ciudad del Este: con sólo 53 años, ya es una leyenda en América del Sur
AFP (Agence France-Presse)
CIUDAD DEL ESTE, Marina de Russé, (AFP) - Ciudad del Este tiene 53 años, pero ya es una leyenda en América del Sur: esta zona franca paraguaya en la triple frontera con Argentina y Brasil atrae a comerciantes de todo el planeta, cineastas e incluso servicios de inteligencia extranjeros.
Ciudad del Este
Comerciantes del mundo entero llegaron a hacer fortuna aquí, en esta zona estratégica llamada "triple frontera".
Sobre gigantescos afiches, los eslóganes se leen en chino, coreano, hindi, urdu. Ciudad del Este tiene un sobrenombre bien ganado: "La ciudad de las 70 etnias", de las cuales la más importante es la comunidad árabe, que allí tiene una de sus mayores concentraciones de América del Sur.
"Para los brasileños en especial, es como si fuera un misterio, la gente tiene ganas de conocer, pero también vienen mucho para comprar (aparatos) electrónicos", asegura un turista brasileño.
A diario, miles atraviesan el puente internacional hacia Ciudad del Este, sobre el río Paraná, para comprar productos más baratos.
La ciudad también capta turistas que visitan las Cataratas del Iguazú, en la frontera con Brasil y Argentina.
Pero la mayoría de los visitantes son intermediairios, los "sacoleiros": 50.000 a 100.000 brasileños que compran a bajo precio en Paraguay para revender más caro en su país.
Ese comercio convirtió Ciudad del Este en la segunda urbe paraguaya, con 300.000 habitantes, y en el pulmón económico de Paraguay, uno de los países más pobres de América del Sur.
Pero Brasil, el rico y gigantesco vecino, ve ese éxito como una amenaza para su industria y reforzó los controles fronterizos.
"Se vuelve difícil trabajar", cuenta Luiz, un 'sacoleiro' que transporta sus mercancías en camioneta.
Para los turistas, Brasil limitó algunas compras a 150 dólares por persona y por mes.
Los brasileños "tienen sus industrias muy fuertes y estas industrias son muy poderosas y son los que trabajan para asfixiar este polo de Ciudad del Este. Creo que tienen que observarse primero ellos por casa, para ver si están colaborando realmente con los países vecinos y mucho más pobres", estimó la alcaldesa de Ciudad del Este, Sandra McLeod.
Brasil intentó legalizar ese comercio, cobrando impuestos a los 'sacoleiros', pero la ley jamás fue aplicada, y las tensiones se mantienen entre ambos países.
La reputación que opaca a la ciudad, acusada de ser sede de tráfico de todo tipo, superó las fronteras paraguayas.
Ciudad del Este ha sido acusada de albergar "células terroristas dormidas" y de financiar grupos islamistas, después de los atentados de Buenos Aires contra la embajada de Israel en 1992 y la sede de la mutual judía argentina AMIA en 1994, que dejaron 114 muertos.
La justicia argentina acusa a Irán y al partido chiita libanés Hezbolá de ser responsables de los atentados que, presume, fueron cometidos con la ayuda de una red local.
Agentes secretos estadounidenses, israelíes y franceses también pasaron por la ciudad después de los atentados del 11 de setiembre de 2001 en Estados Unidos.
"Lo que no nos gusta es que afirmen que están buscando hace 10 años alguna célula terrorista en Ciudad del Este y que no la hayan encontrado, pero que eso se haya esparcido en todo el mundo", deploró McLeod.
"Nosotros construimos estas dos ciudades. Aquí no había asfalto, no había edificios, y ha venido infelizmente esta historia de terrorismo, nosotros (la) sufrimos bastante", deploró de su lado Mohamed Rahal, presidente del centro cultural islámico de Foz de Iguazú, la ciudad brasileña frente a Ciudad del Este.
La ciudad paraguaya atrae a cineastas extranjeros, entre ellos a Michael Mann, quien rodó allí escenas de su largometraje "Miami Vice".
Y también es en la "triple frontera" que la realizadora estadounidense Kathryn Bigelow, ganadora del Oscar en 2010 por "The Hurt Locker", quiere filmar su próxima obra.