AFP (Agencia France-Presse)
Cayenne, Francia. - Una huelga general desde el lunes fue convocada en la Guayana Francesa afectada por un movimiento de descontento social con múltiples reivindicaciones que obligó a aplazar el lanzamiento de un cohete Ariane 5 y valió la recomendación de Washington de evitar viajar al territorio francés.
El sábado, la Unión de Trabajadores de Guayana (UGT) votó por unanimidad una huelga general a partir del lunes, según su secretario general, Albert Darnal, decidida a menos de un mes de la elección presidencial en Francia para proteger a los empleados huelguistas.
Desde hace varios días la Guayana francesa, aquejada por una alta tasa de desempleo y una inseguridad crónica, enfrenta un movimiento de descontento social.
El movimiento reagrupa, entre otros, a huelguistas del grupo energético EDF por reivindicaciones salariales, colectivos que protestan por la inseguridad o que denuncian la falta de acceso a la salud.
Las manifestaciones y bloqueos obligaron a Arianespace a aplazar el lanzamiento, previsto inicialmente para el martes, de un cohete Ariane 5, vitrina económica del territorio, que debía poner en órbita un satélite brasileño y otro surcoreano.
Por las protestas, el rectorado decidió cerrar los establecimientos escolares hasta nueva orden.
La situación llevó a Estados Unidos a aconsejar el viernes a sus ciudadanos que eviten viajar al territorio francés de América del Sur.
El Departamento de Estado dijo que los estadounidenses "deberían evitar desplazarse a Guayana Francesa por el momento" con motivo de "grandes manifestaciones en varios puntos" del territorio de ultramar francés y "a lo largo de rutas que llevan a los países vecinos de Surinam y Brasil".
El gobierno francés envió una misión interministerial, que debía llegar el sábado al territorio, para intentar descomprimir la situación.
En París, el primer ministro Bernard Cazeneuve llamó al "diálogo".
La ministra de Ultramar, Ericka Bareigts, señaló por su parte a la AFP que "la situación sigue tensa. Ya no hay bloqueos, pero sigue siendo complicado".
Una decena de piquetes obstruían desde el jueves lugares estratégicos del litoral, bloqueando, entre otros, los accesos a Cayena, capital del territorio.