Y "le tengo un poco de simpatía", aunque "creo que no era un buen tipo", añadió Von Trier, quien hace dos años provocó un gran escándalo en este certamen con su película "Anticristo", que concursaba por la Palma de Oro.
"Creo que hizo malas cosas, sí, absolutamente, pero puedo imaginarlo sentado en su búnker, al final", declaró Lars Von Trier, que estaba sentado en la rueda de prensa al lado de la protagonista principal de su película, Kisten Dunst, quien dejó traslucir su malestar por esas declaraciones.
"Ay Dios, esto es terrible", murmuró Dunst a la actriz Charlotte Gainsbourg, también protagonista de "Melancolía", que participó en la rueda de prensa.
Respondiendo a una pregunta de un reportero sobre su origen alemán, que descubrió a la muerte de su madre en 1989, el polémico realizador dijo que durante un tiempo creyó que era judío, pero que luego se dio cuenta que era nazi.
"Durante mucho tiempo pensé que era judío, y estaba contento de ser judío. Pero entonces me di cuenta que no lo era. Descubrí que era nazi porque mi familia era alemana, Hartmann, lo que también me gustó", dijo el cineasta, provocando confusión en la sala.
"Sólo estoy diciendo que comprendo al hombre", insistió el realizador. "Pero ciertamente no estoy en favor de la Segunda Guerra Mundial, ni estoy contra los judíos".
"Estoy en favor de los judíos, pero no demasiado, por que Israel jode mucho", explicó el realizador, sumiéndose cada vez más en un pantano de declaraciones confusas y polémicas, que provocaron risas entre algunos de los asistentes a la rueda de prensa, pero sobre todo un fuerte malestar en la sala.
El realizador fue interrogado también sobre declaraciones dadas recientemente a una revista danesa sobre su "gusto por la estética nazi".
"Lo que puedo decir a este respecto es que me gusta mucho (el arquitecto y ministro de Hitler) Albert Speer", explicó.
La revista especializada Hollywood Reporter reaccionó en su sitio en la red a las declaraciones de Lars von Trier, opinando que el cineasta, "que no destaca por su corrección política", se había esta vez sobrepasado, "lanzando una granada contra cualquier sentido de decoro público".
Las declaraciones sorprendentes de uno de los fundadores del movimiento Dogma, que se caracteriza por su minimalismo innovador, podrían impedir que su película, que trata sobre el fin del mundo, conquiste una Palma de Oro, pese a que "Melancholia" fue elogiada por muchos críticos de cine en Cannes.
Lars von Trier explicó en la rueda de prensa que había realizado esta película cuando salía de un estado de ánimo depresivo en el que bebía mucho alcohol y era incapaz de leer.