Cuando Cohen, Lorca, rock y flamenco se fusionaron en un sólo disco
AFP (Agencia France-Presse)
Barcelona, España. - Una semana después del fallecimiento de Leonard Cohen, se estrena mundialmente este viernes en España un documental sobre un disco que hizo las delicias del canadiense uniendo sus versos y los de Federico García Lorca a la voz del cantaor Enrique Morente.
Se trata de "Omega" (1996), uno de los discos más rompedores en la historia del flamenco, en el que el cantaor granadino fallecido en 2010 se unió al grupo de rock Lagartija Nick para musicar al poeta español y también adaptar al castellano canciones como "Hallelujah" o "First we take Manhattan".
Para Cohen, admirador del flamenco y de Lorca hasta el punto de llamar así a su hija, fue un regalo. "Estaba encantadísimo, emocionadísimo. +Es lo más grande que me ha pasado+ me dijo", explica a la AFP su biógrafo y amigo Alberto Manzano.
"El milagro es que Morente vio que había esos elementos flamencos en sus canciones y eso es lo que más le emocionó a Cohen", señala.
El propio cantautor lo reconocería años después, en 2011, al recibir del ahora rey Felipe VI el premio Príncipe de Asturias de las Letras, considerado el Nobel del mundo hispano.
"Todo lo que pueden encontrar de bueno en mis canciones, en mi poesía, está inspirado por esta tierra", agradeció.
En un emotivo discurso que enmudeció a la audiencia, Cohen explicó que no fue capaz de encontrar su voz propia como poeta hasta leer los versos de Lorca, asesinado por las fuerzas franquistas en la Guerra Civil española.
Y homenajeó a un guitarrista español que se encontró tocando en un parque de Montreal y accedió a enseñarle a tocar. Fueron pocas clases porque el músico se suicidó poco después, pero las suficientes para marcar su carrera.
"Esos seis acordes, esa progresión de guitarra (que me enseñó), han sido la base de todas mis canciones y de toda mi música".
"Cohen siempre dijo que la ruina de su vida fue Lorca. Lorca hizo de él un escritor pero no se ganaba la vida. Y ese hispano de Montreal le salvó la vida cuando fue a Nueva York a vender sus canciones", explica Manzano.
Durante 85 minutos repletos de entrevistas e imágenes de archivo de los ensayos y los conciertos, el documental dirigido por José Sánchez-Montes y Gervasio Iglesias reconstruye la creación de un disco culto todavía polémico entre la ortodoxia flamenca.
Inicialmente, el proyecto consistía en adaptar a Cohen al flamenco para que Alberto Manzano se lo regalara al artista canadiense por su 60º aniversario en 1994.
Pero Morente lo llevó más allá. Extendió el repertorio con el gran poemario de Lorca, "Poeta en Nueva York", y rompió moldes fusionándose con el rock duro de Lagartija Nick cuando el flamenco todavía era un coto cerrado para otros estilos.
El resultado: un huracán de decibelios y sentimientos en el que la potente voz de Morente entona los versos de Cohen y Lorca, acompañada por una fusión de sintetizadores y cante jondo, batería y palmas flamencas, guitarras eléctricas y españolas.
"Hay gente que sigue sin querer comprenderlo porque les molesta, ensucia su visión del flamenco. Pero en tiempos de cerrazón, 'Omega' ayudó a democratizar el flamenco", dice Antonio Arias, vocalista de Lagartija Nick.
El documental muestra las dudas del Morente, las presiones para que no tirara adelante el proyecto o incluso el desplante de parte del público del Teatro Albéniz de Madrid cuando al final de un concierto interpretó por sorpresa uno de sus temas con Lagartija Nick.
Veinte años después de su lanzamiento, el director José Sánchez-Montes decidió preparar este documental conmemorativo "para tener una visión más objetiva y global de lo que supuso", dijo a la AFP.
"Es un disco que si saliera hoy, diríamos que sería demasiado moderno para hoy. Esa es la trascendencia de esta obra".
La producción empezó en julio, cuando la salud de Cohen ya estaba demasiado débil para participar y sólo aparece en extractos de una entrevista de 1997.
"La gran tristeza es que Cohen no haya llegado a verlo porque creo que le hubiera gustado", lamentó Sánchez-Montes.
Para Cohen, admirador del flamenco y de Lorca hasta el punto de llamar así a su hija, fue un regalo. "Estaba encantadísimo, emocionadísimo. +Es lo más grande que me ha pasado+ me dijo", explica a la AFP su biógrafo y amigo Alberto Manzano.
"El milagro es que Morente vio que había esos elementos flamencos en sus canciones y eso es lo que más le emocionó a Cohen", señala.
El propio cantautor lo reconocería años después, en 2011, al recibir del ahora rey Felipe VI el premio Príncipe de Asturias de las Letras, considerado el Nobel del mundo hispano.
"Todo lo que pueden encontrar de bueno en mis canciones, en mi poesía, está inspirado por esta tierra", agradeció.
En un emotivo discurso que enmudeció a la audiencia, Cohen explicó que no fue capaz de encontrar su voz propia como poeta hasta leer los versos de Lorca, asesinado por las fuerzas franquistas en la Guerra Civil española.
Y homenajeó a un guitarrista español que se encontró tocando en un parque de Montreal y accedió a enseñarle a tocar. Fueron pocas clases porque el músico se suicidó poco después, pero las suficientes para marcar su carrera.
"Esos seis acordes, esa progresión de guitarra (que me enseñó), han sido la base de todas mis canciones y de toda mi música".
"Cohen siempre dijo que la ruina de su vida fue Lorca. Lorca hizo de él un escritor pero no se ganaba la vida. Y ese hispano de Montreal le salvó la vida cuando fue a Nueva York a vender sus canciones", explica Manzano.
- Un álbum trascendental -
Durante 85 minutos repletos de entrevistas e imágenes de archivo de los ensayos y los conciertos, el documental dirigido por José Sánchez-Montes y Gervasio Iglesias reconstruye la creación de un disco culto todavía polémico entre la ortodoxia flamenca.
Inicialmente, el proyecto consistía en adaptar a Cohen al flamenco para que Alberto Manzano se lo regalara al artista canadiense por su 60º aniversario en 1994.
Pero Morente lo llevó más allá. Extendió el repertorio con el gran poemario de Lorca, "Poeta en Nueva York", y rompió moldes fusionándose con el rock duro de Lagartija Nick cuando el flamenco todavía era un coto cerrado para otros estilos.
El resultado: un huracán de decibelios y sentimientos en el que la potente voz de Morente entona los versos de Cohen y Lorca, acompañada por una fusión de sintetizadores y cante jondo, batería y palmas flamencas, guitarras eléctricas y españolas.
"Hay gente que sigue sin querer comprenderlo porque les molesta, ensucia su visión del flamenco. Pero en tiempos de cerrazón, 'Omega' ayudó a democratizar el flamenco", dice Antonio Arias, vocalista de Lagartija Nick.
El documental muestra las dudas del Morente, las presiones para que no tirara adelante el proyecto o incluso el desplante de parte del público del Teatro Albéniz de Madrid cuando al final de un concierto interpretó por sorpresa uno de sus temas con Lagartija Nick.
Veinte años después de su lanzamiento, el director José Sánchez-Montes decidió preparar este documental conmemorativo "para tener una visión más objetiva y global de lo que supuso", dijo a la AFP.
"Es un disco que si saliera hoy, diríamos que sería demasiado moderno para hoy. Esa es la trascendencia de esta obra".
La producción empezó en julio, cuando la salud de Cohen ya estaba demasiado débil para participar y sólo aparece en extractos de una entrevista de 1997.
"La gran tristeza es que Cohen no haya llegado a verlo porque creo que le hubiera gustado", lamentó Sánchez-Montes.