Decenas de heridos en una explosión en el este de Turquía
AFP (Agencia France-Presse)
Estambul, Turquía. - Casi medio centenar de personas resultaron heridas en un atentado con coche bomba este lunes en el este de Turquía atribuido por las autoridades a los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), según la oficina del gobernador local.
El ataque, perpetrado al día siguiente de la destitución de 28 alcaldes sospechosos de vínculos con la organización separatista, se registró en el corazón de la ciudad de Van, cerca de la sede del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) en el poder y de la oficina del gobernador, custodiados por policías.
El balance provisional del atentado es de por lo menos 48 heridos, dos de ellos graves, según un comunicado de la oficina del gobernador.
En total, "46 civiles y dos policías resultaron heridos en la explosión de un coche bomba por parte de miembros de la organización separatista", agregó aludiendo al PKK, que Ankara y sus aliados occidentales consideran una "organización terrorista".
El atentado, que coincide con el primer día de la fiesta musulmana del sacrificio, el Eid al Adha, no ha sido todavía reivindicado.
"La organización terrorista ya llevó a cabo atentados anteriormente contra la sede de nuestro partido AKP" y esta explosión es "uno de ellos", dijo previamente un diputado regional, Besir Atalay (AKP).
Varias ambulancias y otros vehículos de emergencia se hallaban en el lugar de la explosión, según las cadenas de televisión.
La ciudad turística de Van, situada en los confines del este de Turquía donde conviven turcos y kurdos, se había librado hasta ahora de los peores ataques, contrariamente a los que vive desde hace meses su vecina Diyarbakir (sudeste), de mayoría kurda.
La explosión se registró al día siguiente de la destitución de 28 alcaldes sospechosos de vínculos con el PKK (24 de ellos) o a la cofradía del expredicador Fethullah Gulen (4), acusado de ser el cerebro del golpe de Estado abortado de mediados de julio.
Doce de ellos estaban ya encarcelados. Todos los destituidos fueron reemplazados por administradores próximos al AKP.
Poco antes de la explosión, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan celebró estas destituciones y estimó que llegaban "tarde" y que "hubieran tenido que decidirse hace tiempo".
"Ustedes no pueden respaldar organizaciones terroristas. No tienen ese poder", declaró Erdogan dirigiéndose a los alcaldes destituidos desde una mezquita de Estambul.
El jefe de Estado turco también les acusó de "enviar fondos del Estado a las montañas", donde el PKK tiene sus bases de retaguardia.
Los rebeldes del PKK y el ejército turco rompieron hace un año un frágil alto el fuego y reanudaron las hostilidades en un conflicto que se remonta a 1984.
Ankara lanzó por otro lado el 24 de agosto una ambiciosa ofensiva en el norte de Siria para expulsar a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) de la frontera, así como a los rebeldes turcos del PKK y las YPG (Unidades de Protección del Pueblo Kurdo).
El balance provisional del atentado es de por lo menos 48 heridos, dos de ellos graves, según un comunicado de la oficina del gobernador.
En total, "46 civiles y dos policías resultaron heridos en la explosión de un coche bomba por parte de miembros de la organización separatista", agregó aludiendo al PKK, que Ankara y sus aliados occidentales consideran una "organización terrorista".
El atentado, que coincide con el primer día de la fiesta musulmana del sacrificio, el Eid al Adha, no ha sido todavía reivindicado.
"La organización terrorista ya llevó a cabo atentados anteriormente contra la sede de nuestro partido AKP" y esta explosión es "uno de ellos", dijo previamente un diputado regional, Besir Atalay (AKP).
Varias ambulancias y otros vehículos de emergencia se hallaban en el lugar de la explosión, según las cadenas de televisión.
La ciudad turística de Van, situada en los confines del este de Turquía donde conviven turcos y kurdos, se había librado hasta ahora de los peores ataques, contrariamente a los que vive desde hace meses su vecina Diyarbakir (sudeste), de mayoría kurda.
- Destitución -
La explosión se registró al día siguiente de la destitución de 28 alcaldes sospechosos de vínculos con el PKK (24 de ellos) o a la cofradía del expredicador Fethullah Gulen (4), acusado de ser el cerebro del golpe de Estado abortado de mediados de julio.
Doce de ellos estaban ya encarcelados. Todos los destituidos fueron reemplazados por administradores próximos al AKP.
Poco antes de la explosión, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan celebró estas destituciones y estimó que llegaban "tarde" y que "hubieran tenido que decidirse hace tiempo".
"Ustedes no pueden respaldar organizaciones terroristas. No tienen ese poder", declaró Erdogan dirigiéndose a los alcaldes destituidos desde una mezquita de Estambul.
El jefe de Estado turco también les acusó de "enviar fondos del Estado a las montañas", donde el PKK tiene sus bases de retaguardia.
Los rebeldes del PKK y el ejército turco rompieron hace un año un frágil alto el fuego y reanudaron las hostilidades en un conflicto que se remonta a 1984.
Ankara lanzó por otro lado el 24 de agosto una ambiciosa ofensiva en el norte de Siria para expulsar a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) de la frontera, así como a los rebeldes turcos del PKK y las YPG (Unidades de Protección del Pueblo Kurdo).