Detenida una exagente de la CIA en Portugal para ser extraditada a Italia
AFP (Agencia France-Presse)
Lisboa, Portugal. - Una exagente de la CIA, condenada por la justicia italiana por el rapto en 2003 de un imán egipcio, fue detenida en Portugal para ser extraditada a Italia tras una larga batalla judicial, informó su abogado el martes.
Sabrina de Sousa, que cuenta con la doble nacionalidad portuguesa y estadounidense, fue arrestada el lunes y debería ser trasladada a una cárcel de Oporto (norte), indicó a la AFP su abogado, Manuel Magalhaes Silva.
"La extradición tendrá lugar en los próximos días", declaró.
La justicia portuguesa falló en enero de 2016 a favor de su extradición. El juicio se había efectuado en junio pero el procedimiento sufrió retrasos a causa de una serie de recursos presentados.
El imán Abu Omar fue secuestrado en Milán el 17 de febrero de 2003 durante una operación coordinada por los servicios secretos italianos y la CIA. Desde allí fue transferido a Egipto, donde fue torturado, según sus abogados.
En septiembre de 2012, la Corte de Casación italiana confirmó penas de 7 a 9 años de prisión para un militar estadounidense y 22 agentes de la CIA, incluida De Sousa, cuya pena se redujo después a 4 años.
Pese a que De Sousa admitió haber colaborado como intérprete con el grupo que organizó el secuestro, negó cualquier implicación directa en la operación.
"La extradición tendrá lugar en los próximos días", declaró.
La justicia portuguesa falló en enero de 2016 a favor de su extradición. El juicio se había efectuado en junio pero el procedimiento sufrió retrasos a causa de una serie de recursos presentados.
El imán Abu Omar fue secuestrado en Milán el 17 de febrero de 2003 durante una operación coordinada por los servicios secretos italianos y la CIA. Desde allí fue transferido a Egipto, donde fue torturado, según sus abogados.
En septiembre de 2012, la Corte de Casación italiana confirmó penas de 7 a 9 años de prisión para un militar estadounidense y 22 agentes de la CIA, incluida De Sousa, cuya pena se redujo después a 4 años.
Pese a que De Sousa admitió haber colaborado como intérprete con el grupo que organizó el secuestro, negó cualquier implicación directa en la operación.