En un editorial del periódico de propiedad saudí Al Hayat titulado “La Oposición Libanesa Clonada”, Daud al Shiryan escribió que el campo de Hariri “intentó imponer a un primer ministro utilizando las calles y quemando neumáticos y empleando los mismos medios utilizados por sus adversarios y que siempre había criticado,” señaló. “Algunos diputados del bloque de Hariri han empleado claramente un lenguaje sectario.”

Para Shiryan, la partida de Hariri “no es el fin del mundo” y añadió que él debe “aceptar las reglas de la democracia” y apoyar al primer ministro designado Nayib Mikati.

Abdul Rahman al-Rashid escribió en Asharq al-Awsat que Hariri “fue injustamente expulsado del cargo del puesto de primer ministro, pero las acciones de sus seguidores no fueron civilizadas.”

“Las imágenes de los manifestantes que descendieron por las calles para bloquear el tráfico y quemar neumáticos no se corresponden con la imágenes del campo del 14 de Marzo que había sido un movimiento en el mundo árabe que respetaba las reglas,” escribió Rashid, director general del canal por satélite Al Arabiya.

Él dijo que Hariri debería realizar un acercamiento a Mikati, al que describió como una “personalidad respetable”.