Ejército sirio estrecha cerco de Quseir, adonde acuden combatientes opositores
AFP (Agencia France-Presse)
BEIRUT. - Las tropas de Bashar al Asad y sus aliados del Hezbolá chiita libanés estrechaban el viernes el cerco de Quseir, en el oeste de Siria, aunque la oposición aseguraba que numerosos milicianos lograban llegar hasta esa estratégica ciudad rebelde para reforzar la resistencia.

"Unos 1.000 combatientes de toda Siria" penetraron en el bastión rebelde cerca de la frontera libanesa, informó a la prensa el líder interino de la opositora Coalición Nacional Siria, George Sabra, en Estambul.
Liwa al-Tawhid, un grupo armado respaldado por Catar y próximo a los Hermanos Musulmanes, anunció en su página de Facebook que sus combatientes alcanzaron la ciudad sitiada.
"Cientos" de rebeldes rompieron las líneas del ejército cerca del pueblo de Shamsin, en el nordeste de Quseir, tras perder a 11 combatientes, según Rami Abdel Rahman, director del opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en el Reino Unido.
Días antes, Sabra había llamado a los combatientes rebeldes a acudir a Quseir y a organizaciones de asistencia, como la Cruz Roja o la Media Luna Roja, a crear un corredor humanitario para los civiles atrapados.
Según la televisión pública siria, tropas de Asad y del Hezbolá conquistaron el distrito de Aryun (norte de Quseir) el jueves, dejando pocas posibilidades de escaparse a los rebeldes presentes en la ciudad.
Por su parte, Rusia podría entregar a Siria 10 aviones de combate Mig-29 ultramodernos, indicó el viernes el director general de la empresa constructora de estos aviones, según agencias rusas.
"Se están definiendo los detalles del contrato", indicó Korotkov, según Interfax.
Hasta ahora, Rusia había afirmado que entregaba armas a Siria en virtud de contratos ya firmados.
Además, dos periódicos rusos afirmaron el viernes que Moscú no entregó aún el sofisticado sistema de misiles de defensa antiaérea tierra-aire S-300 a Siria, contrariamente a lo que dio a entender Asad, y podría no hacerlo este año.
En una entrevista con el canal de televisión del Hezbolá, Al Manar, difundida el jueves, Asad indicó, refiriéndose a la entrega de esos sistemas de defensa prometidos por Moscú, que "todos los acuerdos con Rusia se cumplirán y una parte ya se ha cumplido recientemente".
Pero según fuentes del complejo industrial militar ruso, citadas por los periódicos Vedomosti y Kommersant, esos sistemas de defensa aún no fueron entregados.
Según Vedomosti, no es seguro que los sistemas, cuya venta por 1.000 millones de dólares fue pactada en 2010, sean entregados este año.
Moscú había defendido el martes la entrega a Damasco de S-300, unos sofisticados sistemas de defensa antiaérea equipados con misiles tierra-aire capaces de interceptar en vuelo aviones de combate o misiles teleguiados. Rusia estima que son un factor de "estabilización" que permitiría dificultar cualquier posible intervención armada extranjera en Siria.
Asad afirmó por otra parte que en Siria hay una "presión popular" para abrir el frente del Golán contra Israel, país que ocupa esta región desde 1967.
Por su parte, el ministro de Agua y Energía israelí, Sylvan Shalom, había asegurado el jueves que su país no quiere provocar una "escalada" militar con Siria, si bien no permitirá la entrega de armas "estratégicas", especialmente al Hezbolá.
Interrogado sobre el suministro de sistemas de defensa antiaérea del tipo S-300 a Siria, Shalom declaró: "Desde hace años Siria dispone de armas estratégicas, el problema se plantearía si estas armas pueden caer en otras manos y ser utilizadas contra nosotros. En este caso, tendríamos que actuar", añadió.