AFP (Agencia France-Presse)
KIEV. - El ejército ucraniano instó este viernes al presidente Viktor Yanukovich a adoptar "medidas de emergencia" para "estabilizar" el país, saliendo de su reserva después de más de dos meses de fuertes protestas que condujeron a la dimisión del gobierno.
Los militares habían subrayado anteriormente que no intervendrían en esta crisis que divide al país y que según algunos analistas podrían desembocar en una guerra civil.
La entrada de este nuevo actor llega en un momento de impasse político en esta exrepública soviética, donde el poder y la oposición se acusan mutuamente de ser responsables del conflicto.
El presidente Yanukovich, por su lado, está oficialmente en "baja médica" desde el jueves.
En un comunicado publicado en la página internet del ministerio de Defensa, los militares "instaron al jefe supremo del ejército (el jefe de Estado) a tomar medidas de emergencia (...) para estabilizar la situación del país".
Asimismo, consideraron "inaceptable la toma de edificios públicos" y advirtieron que una escalada de la contestación "amenazaría la integridad territorial" de Ucrania.
Por el momento se desconoce cuáles son las medidas exigidas por el ejército. Hasta ahora el gobierno se había negado a proclamar el estado de emergencia.
Por otra parte, mientras la crisis se intensifica en Ucrania, Estados Unidos se unió a los países europeos que han multiplicado las misiones de mediación y las declaraciones desde hace dos meses.
El secretario de Estado John Kerry se reunirá el sábado con los dirigentes de la oposición, entre ellos el excampeón de boxeo Vitali Klitschko y el exministro Arseni Yatsenyuk, al margen de la Conferencia sobre seguridad de Múnich.
El viceprimer ministro ruso Dmitri Rogozine criticó esa iniciativa, a la que calificó de "circo".
Los europeos han multiplicado los llamados a la calma, ante el temor de que este conflicto -que ha dejado al menos cuatro muertos y más de 500 heridos- degenere.
En la plaza de la Independencia, en pleno centro de Kiev, un puñado de opositores seguían el viernes "montando guardia" junto a fogones, para enfrentar temperaturas de hasta 20 grados bajo cero.
"Estaremos aquí hasta la capitulación completa del poder", y la dimisión del presidente Yanukovich, afirma Micha, de unos cincuenta años.
Desde que empezó el conflicto, Yanukovich hizo varias concesiones, como aceptar la dimisión de su gobierno, derogar un paquete de leyes que restringían la libertad de manifestarse y votar una amnistía para los manifestantes arrestados, pero los opositores rechazaron la condición impuesta: abandonar los edificios y calles ocupadas en un plazo de 15 días.
El jefe de Estado se encuentra de baja médica a causa de "una enfermedad respiratoria aguda".
Por otra parte, un conocido activista ucraniano, Dmytro Boulatov, secuestrado el 22 de enero y liberado el jueves por la noche en un bosque, dijo haber sido torturado durante una semana.
Desde mediados de enero, decenas de manifestantes han sido arrestados, tanto en Kiev, como en otras regiones.
El movimiento de protesta nació a finales de noviembre tras la decisión repentina de Yanukovich de renunciar a firmar un acuerdo de asociación con la UE, negociado durante meses. Optó en cambio por un acercamiento a Rusia, que le concedió un crédito de 15.000 millones de dólares y una reducción del precio del gas.