El Estado Islámico vuelve a atacar Kobane en el norte de Siria
AFP (Agencia France-Presse)
Beirut, Líbano. - El grupo yihadista Estado Islámico (EI) lanzó el jueves un ataque sorpresa para volver a entrar en la ciudad kurda de Kobane, donde en enero pasado habían sufrido su peor derrota desde el inicio de su expansión en Siria.
Los yihadistas entraron en Kobane (Ain Al Arab) mediante el ardid de vestirse con uniformes de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG), según testimonios de militantes.
En enero, esa localidad situada en la frontera con Turquía, se convirtió en un símbolo de la lucha antiyihadista cuando tropas kurdas, ayudadas por la coalición liderada por Estados Unidos, lograron expulsar al EI tras cuatro meses de combates.
Los yihadistas perpetraron tres atentados suicidas con coches bomba cerca de un puesto fronterizo con la frontera turca, comunicó la ONG Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
El EI afirmó haber "asaltado la ciudad" tras varias "operaciones kamikazes (...) matando a decenas de ateos", en referencia a las YPG.
Los combates, que dejaron al menos 57 muertos -35 kurdos y 22 yihadistas-, según el OSDH, continuaban por la tarde, sobre todo en el sur de Kobane, donde las YPG desplegaron refuerzos.
"Varios civiles son utilizados como escudos humanos en una casa del sur de la ciudad", dijo Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
En los alrededores de la localidad, el EI ejecutó a 23 kurdos, incluidos mujeres y niños, según el OSDH.
La organización "quiere sembrar confusión para vengarse de la derrota de enero y hacer huir a los kurdos", declaró Idris Nasan, un responsable local.
Ankara negó este jueves que los yihadistas hubieran transitado por Turquía para atacar Kobane, al contrario de lo que afirmaron los kurdos.
La oficina del gobernador de Sanliurfa, en el sur de Turquía, afirmó que los combatientes del EI llegaron desde "la ciudad siria de Jarablos".
Los yihadistas también lanzaron un ataque en Hasaké (noroeste), conquistando por primera vez dos barrios de esa capital provincial, cuyo control comparten las fuerzas gubernamentales y los kurdos.
Al menos 20 yihadistas y 30 soldados del ejército sirio murieron en los enfrentamientos, que seguían a última hora de la tarde.
Las fuerzas gubernamentales lograron, sin embargo, retomar Nachwa en el suroeste de esa ciudad.
La ofensiva de EI en los sectores kurdos del norte de Siria se produce tras una serie de derrotas yihadistas en la provincia de Raqa, en particular la pérdida de la ciudad de Tall Abyad, que permitía al grupo extremista sunita hacer transitar armas y combatientes desde Turquía.
Las fuerzas kurdas se encuentran a uno 55 km de Raqa, la "capital" del EI en Siria.
Los combates de "Kobane y Hasaké forman parte de una estrategia clásica del EI, que recurre a ataques inesperados y espectaculares como operaciones de diversión", dijo Charles Lister, experto del Brooking Doha Centre. En este caso se trata de "distraer a los kurdos de Raqa", agregó.
En el sur de Siria, una alianza de grupos rebeldes, entre ellos la rama siria de Al Qaida, acentuaron la presión sobre la ciudad de Deraa, cuna de la revolución del 2011, en manos de las tropas gubernamentales. Los combates causaron al menos 38 muertos -18 rebeldes y 20 soldados-, según el OSDH.
La mayoría de la provincia de Deraa está bajo control de los rebeldes, que en las últimas semanas conquistaron varios territorios.
Por otra parte, el OSDH afirmó que el EI había vendido este jueves a 42 iraquíes de la minoría yazidí a sus combatientes en Mayadeen, uno de sus bastiones del este de Siria.
Esas mujeres, que el grupo yihadista trata como "esclavas", fueron secuestradas en 2014 durante la ofensiva del EI en la región de Monte Sinjar, feudo de los yazidíes en el norte de Irak.
En enero, esa localidad situada en la frontera con Turquía, se convirtió en un símbolo de la lucha antiyihadista cuando tropas kurdas, ayudadas por la coalición liderada por Estados Unidos, lograron expulsar al EI tras cuatro meses de combates.
Los yihadistas perpetraron tres atentados suicidas con coches bomba cerca de un puesto fronterizo con la frontera turca, comunicó la ONG Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
El EI afirmó haber "asaltado la ciudad" tras varias "operaciones kamikazes (...) matando a decenas de ateos", en referencia a las YPG.
Los combates, que dejaron al menos 57 muertos -35 kurdos y 22 yihadistas-, según el OSDH, continuaban por la tarde, sobre todo en el sur de Kobane, donde las YPG desplegaron refuerzos.
"Varios civiles son utilizados como escudos humanos en una casa del sur de la ciudad", dijo Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
En los alrededores de la localidad, el EI ejecutó a 23 kurdos, incluidos mujeres y niños, según el OSDH.
La organización "quiere sembrar confusión para vengarse de la derrota de enero y hacer huir a los kurdos", declaró Idris Nasan, un responsable local.
Ankara negó este jueves que los yihadistas hubieran transitado por Turquía para atacar Kobane, al contrario de lo que afirmaron los kurdos.
La oficina del gobernador de Sanliurfa, en el sur de Turquía, afirmó que los combatientes del EI llegaron desde "la ciudad siria de Jarablos".
- Operaciones de diversión -
Los yihadistas también lanzaron un ataque en Hasaké (noroeste), conquistando por primera vez dos barrios de esa capital provincial, cuyo control comparten las fuerzas gubernamentales y los kurdos.
Al menos 20 yihadistas y 30 soldados del ejército sirio murieron en los enfrentamientos, que seguían a última hora de la tarde.
Las fuerzas gubernamentales lograron, sin embargo, retomar Nachwa en el suroeste de esa ciudad.
La ofensiva de EI en los sectores kurdos del norte de Siria se produce tras una serie de derrotas yihadistas en la provincia de Raqa, en particular la pérdida de la ciudad de Tall Abyad, que permitía al grupo extremista sunita hacer transitar armas y combatientes desde Turquía.
Las fuerzas kurdas se encuentran a uno 55 km de Raqa, la "capital" del EI en Siria.
Los combates de "Kobane y Hasaké forman parte de una estrategia clásica del EI, que recurre a ataques inesperados y espectaculares como operaciones de diversión", dijo Charles Lister, experto del Brooking Doha Centre. En este caso se trata de "distraer a los kurdos de Raqa", agregó.
En el sur de Siria, una alianza de grupos rebeldes, entre ellos la rama siria de Al Qaida, acentuaron la presión sobre la ciudad de Deraa, cuna de la revolución del 2011, en manos de las tropas gubernamentales. Los combates causaron al menos 38 muertos -18 rebeldes y 20 soldados-, según el OSDH.
La mayoría de la provincia de Deraa está bajo control de los rebeldes, que en las últimas semanas conquistaron varios territorios.
Por otra parte, el OSDH afirmó que el EI había vendido este jueves a 42 iraquíes de la minoría yazidí a sus combatientes en Mayadeen, uno de sus bastiones del este de Siria.
Esas mujeres, que el grupo yihadista trata como "esclavas", fueron secuestradas en 2014 durante la ofensiva del EI en la región de Monte Sinjar, feudo de los yazidíes en el norte de Irak.