El Pentágono infló los informes sobre la reconstrucción de Irak
El País, España
Documentos secretos revelan los grandes errores de la Administración Bush en un proceso que ha costado 100.000 millones de dólares, según 'The New York Times'
Entre las conclusiones del estudio, destaca el hecho de que cinco años después del mayor proyecto de reconstrucción desde el Plan Marshall tras la II Guerra Mundial, el Gobierno estadounidense aún no tiene ni las políticas, ni la capacidad técnica ni la estructura organizativa necesarias para llevar a cabo un proceso como éste, señala el diario. Su conclusión final es que el esfuerzo ha fallado en parte porque ninguna agencia del Gobierno se hizo cargo del proyecto al principio.
Powell conocía la manipulación
El ex secretario de Estado Colin Powell, según el informe, dijo, por ejemplo, que los meses que siguieron a la invasión en 2003, el Departamento de Defensa "siguió inventándose las cifras de las fuerzas de seguridad iraquíes -el número llegó a subir en 20.000 efectivos varias veces en una semana-. Ahora tenemos 80.000, luego 10.000, luego 120.000".
En esta afirmación de Powell coincidieron también el ex comandante de las tropas de tierra en Irak, Ricardo Sánchez, y Paul Bremen, el administrador civil antes de la toma de posesión del Gobierno iraquí en junio de 2004. Powell se ha negado a comentar nada al respecto al Times.
El informe, titulado Duras lecciones: la experiencia de la reconstrucción de Irak, fue elaborado por la Oficina del Inspector General para la Reconstrucción de Irak, dirigido por Stuart Bown Jr., un abogado republicano que visita Irak frecuentemente y que cuenta con un equipo de ingenieros y auditores allí, cuenta el periódico.
Se basa en más de 500 entrevistas y en más de 600 auditorías, inspecciones e investigaciones que la oficina de Bowen recopiló durante años.
La número dos de Bowen, Ginger Cruz, se ha negado a hablar sobre el asunto al periódico, pero ha anunciado que el informe será presentado el próximo 2 de febrero en la primera audiencia de la Comisión de Contratación en Tiempos de Guerra, creada en virtud de una legislación apoyada por los demócratas.