El ataque es una respuesta a los golpes que ha sufrido Sendero Luminoso

Peru21, Perú

Rubén Vargas, especialista en temas de seguridad y narcotráfico, sostuvo que el grupo subversivo se encuentra debilitado en el Alto Huallaga. En la víspera, un ataque contra agentes policiales dejó cuatro muertos y cinco heridos, dos de ellos graves.

El analista Rubén Vargas, especialista en temas de seguridad y narcotráfico, aseguró que Sendero Luminoso (SL) se encuentra debilitado en la zona del Alto Huallaga y que el reciente ataque a un comando de la Policía se trata de una respuesta a los numerosos golpes que la Dirección Contra el Terrorismo (Dircote) ha asestado a la subversión en los últimos tiempos.

En el mismo sentido se pronunció esta mañana el ministro de Defensa, Ántero Flores-Aráoz, quien destacó en RPP los avances en la lucha contra el narcoterrorismo, aunque reconoció que lo hecho hasta el momento, pese a que es importante, no es suficiente para terminar con el problema.

Una columna de 40 senderistas atacó ayer un convoy de la Policía Nacional en las afueras de Tingo María dejando cuatro efectivos muertos y cinco heridos, dos de ellos de gravedad. El ataque ocurrió a las 4:50 de la tarde, a la altura del sector La Victoria, ubicado en el kilómetro 20 de la carretera Jorge Basadre.

“De los dirigentes con formación militar y política solo queda Artemio (en el Huallaga). Todos los que estuvieron con él en los últimos años han caído. Sigo afirmando que SL en el Huallaga está debilitado y lo ocurrido ahora es una respuesta a todas esas acciones importantes que hizo la Dircote”, comentó Vargas a Perú21.pe.

Recordó que en febrero del 2006 cayó el camarada ‘Clay’, mando militar de SL en el Huallaga, quien había operado cerca de 20 años en esta región. Posteriormente, en noviembre del 2007, fue abatido Epifanio Espíritu Acosta, alias ‘JL’, segundo mando senderista de importancia en la zona.

“Las acciones terroristas contra las fuerzas del orden en el Huallaga estaban más o menos controladas. En lo que va del año es el primer ataque terrorista en la zona”, comentó el especialista. El último ataque ocurrido en esta parte del país ocurrió en junio del 2007, cuando narcosenderistas mataron en Shapaja a tres agentes policiales y a un fiscal.

Sin embargo, aclaró que diferente es la situación en la zona del valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), donde si han ocurrido diversos ataques a las fuerzas del orden, una de los últimos ocurridos en Vizcatán (Ayacucho), donde una patrulla militar fue sorprendida por los disparos de los narco-senderistas, dejando a dos efectivos heridos.


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