El satélite "Aeolus" debe mejorar mucho las previsiones del tiempo
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Darmstadt. - El satélite científico "Aeolus", de la Agencia Espacial Europea (ESA), cuyo lanzamiento está programado para este lunes desde el centro espacial Kourou, en la Guayana Francesa, tiene la misión de elaborar por primera vez perfiles de vientos de toda la Tierra y aportar así nuevos conocimientos para los pronósticos del tiempo.
¿Cómo influyen los vientes en las regiones tropicales del Pacífico en el tiempo en Europa? Y ¿cómo pueden mejores observaciones de un viento en altura, de una corriente en chorro, mejorar las previsiones de tormenta? Para poder responder a estas preguntas se elaborarán por primera vez perfiles de viento desde el espacio.
"Esperamos que las mediciones de "Aeolus" permitan un claro avance de los modelos de la dinámica del viento de la atmósfera terrestre", afirmó la científica espacial Anne Grete Straume en Darmstadt.
Es cierto que hay muchos globos meteorológicos, boyas, barcos, aviones y satélites que suministran datos sobre los vientos. Sin embargo, esta red es poco densa en el hemisferio sur, sobre los océanos, los trópicos y por encima de una altura de diez kilómetros. "Aeolus" deberá medir por primera vez las velocidades del viento en todo el globo terraqueo desde una altura de 30 kilómetros hasta la tierra o sobre nubes gruesas.
"Actualmente hay casi un millón de mediciones del viento en menos de 24 horas. Con el "Aeolus" se suma alrededor de un ocho por ciento más", indicó Straume. "Si tuviésemos más satélites de este tipo que observen la situación en varias direcciones, habríamos logrado un avance sustancial en el pronóstico del tiempo".
Según Straume, está previsto que en menos de un año después del lanzamiento del "Aeolus", los servicios meteorológicos europeos puedan incluir los nuevos datos en sus modelos de previsión del tiempo. Los expertos esperan que ello permita "mejorar significativamente" sobre todo las previsiones para cinco hasta siete días.
El meteorólogo alemán Alexander Cress citó el siguiente ejemplo: una perturbación atmosférica sobre el Pacífico, por debajo de la corriente de chorro, fue malinterpretada en su momento debido a la falta de datos. La perturbación no identificada correctamente pasó sobre el Pacífico, Norteamérica y el Atlántico y se intensificó en Europa. La consecuencia fue que la tormenta fue totalmente infravalorada.
La misión científica del "Aeolus", que es "técnicamente muy complicada y exigente", ha sido preparada durante 15 años, informó la ESA. El satélite, cuya construcción costó más de 300 millones de euros, es "extremadamente frágil" y la técnica es "muy complicada y sumamamente sensible".
El "Aeolus" (Dios de los vientos) orbitará la Tierra a una altura de solo 320 kilómetros. Por cuanto que la resistencia del aire y la fricción frenan el satélite a esta altura, haciendo que este descienda, es necesario hacer maniobras y correcciones permanentes de la órbita, lo que limita la vida útil de la sonda. Se prevé que después de permanecer cuatro años en el espacio, el combustible se agote y el satélite se extinga en la atmósfera de la Tierra.
"Esperamos que las mediciones de "Aeolus" permitan un claro avance de los modelos de la dinámica del viento de la atmósfera terrestre", afirmó la científica espacial Anne Grete Straume en Darmstadt.
Es cierto que hay muchos globos meteorológicos, boyas, barcos, aviones y satélites que suministran datos sobre los vientos. Sin embargo, esta red es poco densa en el hemisferio sur, sobre los océanos, los trópicos y por encima de una altura de diez kilómetros. "Aeolus" deberá medir por primera vez las velocidades del viento en todo el globo terraqueo desde una altura de 30 kilómetros hasta la tierra o sobre nubes gruesas.
"Actualmente hay casi un millón de mediciones del viento en menos de 24 horas. Con el "Aeolus" se suma alrededor de un ocho por ciento más", indicó Straume. "Si tuviésemos más satélites de este tipo que observen la situación en varias direcciones, habríamos logrado un avance sustancial en el pronóstico del tiempo".
Según Straume, está previsto que en menos de un año después del lanzamiento del "Aeolus", los servicios meteorológicos europeos puedan incluir los nuevos datos en sus modelos de previsión del tiempo. Los expertos esperan que ello permita "mejorar significativamente" sobre todo las previsiones para cinco hasta siete días.
El meteorólogo alemán Alexander Cress citó el siguiente ejemplo: una perturbación atmosférica sobre el Pacífico, por debajo de la corriente de chorro, fue malinterpretada en su momento debido a la falta de datos. La perturbación no identificada correctamente pasó sobre el Pacífico, Norteamérica y el Atlántico y se intensificó en Europa. La consecuencia fue que la tormenta fue totalmente infravalorada.
La misión científica del "Aeolus", que es "técnicamente muy complicada y exigente", ha sido preparada durante 15 años, informó la ESA. El satélite, cuya construcción costó más de 300 millones de euros, es "extremadamente frágil" y la técnica es "muy complicada y sumamamente sensible".
El "Aeolus" (Dios de los vientos) orbitará la Tierra a una altura de solo 320 kilómetros. Por cuanto que la resistencia del aire y la fricción frenan el satélite a esta altura, haciendo que este descienda, es necesario hacer maniobras y correcciones permanentes de la órbita, lo que limita la vida útil de la sonda. Se prevé que después de permanecer cuatro años en el espacio, el combustible se agote y el satélite se extinga en la atmósfera de la Tierra.