"España ha invertido en recursos humanos y financieros en la lucha contra el racismo y la discriminación racial", afirma la ECRI, creada por el Consejo de Europa, en su cuarto informe sobre España desde 1998, difundido el martes en Estrasburgo (este de Francia).
Entre los avances destacados por la citada Comisión en el informe de 50 páginas figuran la designación de fiscales especializados para proteger a las víctimas y luchar contra la ciber delincuencia. También destaca la creación en 2009 del Consejo para la Promoción de la Igualdad de Trato y No Discriminación de las Personas por el Origen Racial o Etnico.
El gobierno impulsó un plan de estudios en la asignatura  "educación para la ciudadanía y los derechos humanos" y una nueva legislación, como asimismo la creación de instituciones para elaborar políticas y proponer sanciones contra federaciones, clubes de fútbol o espectadores por actos de racismo y xenofobia.
Las autoridades "deberían supervisar atentamente el aumento de los movimientos neonazis y las bandas violentas de jóvenes", dice la ECRI.
"España ha tomado medidas para promover la integración de los no ciudadanos" empezando por la inscripción de los extranjeros en los padrones municipales para acceder a los servicios sociales básicos y a la asistencia sanitaria gratuita, dice el ECRI que recomienda a las autoridades que se "aseguren de que a nadie se rehúse ilegalmente su inscripción" en los mismos.
También adoptó un "plan de acción para el desarrollo de la población gitana", agrega.
"El ECRI acoge con beneplácito estos acontecimientos positivos (...) sin embargo (...) algunas cuestiones siguen siendo motivo de preocupación" como la falta de datos sobre actos de racismo y discriminación racial y el aumento del racismo en internet en España, donde existe un gran numero de movimientos neonazis.
El informe advierte que "los alumnos inmigrantes y gitanos son distribuidos de forma desigual en las aulas" generando "escuelas guetos" y tampoco existe una comisión independiente encargada de investigar las denuncias por mala conducta policial.
Entre las recomendaciones formuladas por la ECRI, que iniciará un seguimiento a más tardar dentro de dos años, menciona la recolección y publicación de datos sobre racismo y discriminación racial.
Recomienda "encarecidamente" a las autoridades que garanticen una distribución uniforme de alumnos españoles, inmigrantes y gitanos y que policías, personal de seguridad, fiscales, jueces y autoridades de frontera reciban "cursos obligatorios sobre derechos humanos".
También aconseja eliminar de la nueva ley sobre el derecho de asilo su limitación a los nacionales de países no comunitarios y a los apátridas.
Las autoridades deben garantizar a los menores no acompañados una "representación legal independiente en todos los procesos de repatriación", dice la ECRI en alusión a los menores inmigrantes que llegan a España de forma ilegal y que luego son repatriados.
"Debería respetarse en la práctica la libertad de manifestar el culto colectivamente y aprobarse las solicitudes para construir un número suficiente de mezquitas", indica el informe que también considera que "los alumnos musulmanes deberían disfrutar en la práctica de su derecho a recibir instruccion religiosa basada en el islam".
La ECRI entiende que los "no ciudadanos", es decir extranjeros de países no comunitarios, "deberían tener la posibilidad de votar y ser elegidos en elecciones locales.
"A pesar de ser condenado públicamente, el racismo es tolerado en privado", asegura la ECRI que recomienda la adopción de "mecanismos de regulación" sobre normas éticas y de conducta en los medios de comunicación para no crear una atmósfera hostil hacia los inmigrantes y/o grupos minoritarios.
Los inmigrantes "aportaron una importante contribución al éxito económico" de España pero a raíz de la recesión que golpea a ese país, "muchos españoles" consideran que la inmigración "representa un problema, quita puestos de trabajo y contribuye al aumento de la delincuencia", advierte la ECRI, un organismo independiente cuyo anterior informe sobre España fue publicado en febrero de 2006.