Según la radio pública RNE, Berlanga -- que ganó el premio Príncipe de Asturias de las Artes en 1986--, padecía la enfermedad de Alzheimer.
Su última aparición pública se produjo en julio, con la inauguración de una sala de espectáculos que lleva su nombre en Madrid. Su última película "París-Tombuctú" data de 1999.
"Es una pérdida enorme para el cine español y para toda la cultura española", declaró en Radio Nacional de España (RNE) la ministra de la Cultura, Ángeles González Sinde, .
"La obra de Luis García Berlanga va a perdurar en el tiempo como cualquiera de los grandes maestros de la literatura, pintura o música de este país", agregó.
Álex de la Iglesa, presidente de la Academia de cine español, lamentó la muerte de "un gran amigo". "Se ha muerto la persona mas importante e influyente del cine español si no el mayor cineasta de todo los tiempos", comentó
El cineasta que en 1993 logró un Goya por uno de sus últimos filmes, "Todos a la cárcel", estaba afectado por la enfermedad de Alzheimer.
García Berlanga falleció en su residencia en Pozuelo, en los suburbios de Madrid, este sábado en la mañana.
Una capilla ardiente será instalada en la Academia de cine español en Madrid, informó la institución.
En julio pasado, el cineasta había aparecido en un silla de ruedas en la inauguración de una sala de cine que lleva su nombre en la capital española y no parecía reconocer a los que lo rodeaban, según informó el diario El País.
Nacido el 12 de junio de 1921 en Valencia, García Berlanga estaba considerado como un "clásico del cine español" y había comenzado su carrera bajo la dictadura de Francisco Franco (1939-1975).
Su filme más conocido, "¡Bienvenido Mister Marshall!" (1952) relata en un tono de comedia irónica y también con valor de cargo contra Estados Unidos, la España de los años 1950 en la vana espera de lo moderno y del desarrollo, que debería aportar Estados Unidos.
"Plácido" (1961), "El Verdugo" (1963) y "La escopeta nacional", (1978) también son obras muy conocidas y que se han convertido en clásicos.
Su último filme, "París-Tombuctú" en el que enfoca el tema de la muerte, fue realizado en 1999.
"Con Berlanga muere un estilo, una voz, la visión de un país, una cultura, una filosofía propia sobre el género humano", escribió el diario El País en su edición internet.
"Fue fetichista, director de una colección de literatura erótica que ha marcado época, como 'la sonrisa vertical'. Pero ante todo fue el cronista y la conciencia -buena y mala- de un país enfangado por los traumas de la guerra, el notario de una supervivencia colectiva.", señaló el cotidiano español.