Fernando Trueba conmueve en San Sebastián con su película más francesa
AFP (Agencia France-Presse)
SAN SEBASTIÁN, España. - El cineasta español Fernando Trueba conmovió este lunes en el festival de cine de San Sebastián con la poética "El artista y la modelo", sobre la relación entre un viejo escultor francés y una muchacha española en la Francia ocupada por los nazis.
Jean Rochefort-izquierda-y Aida Folch, en una escena de la película El artista y la modelo.
Cros, basado en Aristide Maillol y encarnado por el veterano actor francés Jean Rochefort, encuentra la inspiración en Mercè, una joven republicana española llena de vida, que la esposa del escultor -interpretada por Claudia Cardinale- recoge en las calles del pueblo.
"La película lo que ha intentado retratar es un momento de plenitud inesperado", dice Trueba tras la proyección de la cinta, hablada en francés, en la sección oficial del festival, donde compite por la Concha de Oro al mejor filme.
Cros "ha perdido cualquier confianza en la especie, en su trabajo" y "cuando piensa que todo se ha acabado, que nada tiene ningún sentido, de repente la vida hace irrupción", agrega.
"Él está cerca de la muerte y la juventud llega", afirma Rochefort, para quien "esta película es una incitación a continuar respirando pase lo que pase".
Filmada como si de una obra de arte se tratase, la sensual Aida Folch, que da vida a la muchacha española, recuerda a actrices mediterráneas de otro tiempo, como Sofía Loren o la propia Cardinale.
"Claudia era el amor de mi infancia y mi adolescencia", reconoce Trueba, admitiendo que hay en la película un cierto homenaje a la italiana.
Por su parte, Folch, que ya trabajó con el cineasta en "El embrujo de Shanghái" (2002), considera que esta vez "ha sido distinto". En la primera película con Trueba "yo era muy pequeña, él me trataba como una niña actriz y ahora me trata como una actriz", dice.
En la convulsión de una guerra que lleva a Mercè, huida de los campos franquistas, a ayudar a un joven resistente francés a escapar de los nazis, "el arte es una necesidad", afirma Rochefort.
A través del arte, el escultor enseña a la joven a entender el mundo, mientras ella despierta el alma adormecida del artista.
"El alma de un pintor está en la mano, no en sus ideas o su teoría artística, sino en el hecho de crear", afirma Trueba -ganador de un Oscar en 1993 con "Belle Epoque"- que dedicó la película a su hermano el fallecido escultor Máximo Trueba.
"Su película me ha llegado al corazón", le lanzó al cineasta un periodista estadounidense, poniendo palabras al sentimiento general de la sala.
Además de reunir de nuevo a Rochefort y Cardinale -"para mí fue formidable trabajar en esta película con Jean al que no veía desde hace mucho tiempo", dijo la italiana-, la cinta devuelve a la pantalla a la actriz española Chus Lampreave en el papel de una entrañable criada española.
En su cuarto día, el festival de San Sebastián proyectó también el lunes en la sección oficial a concurso "Foxfire", película del francés Laurent Cantet que narra la violenta rebelión de un grupo de chicas de clase trabajadora contra la machista sociedad neoyorquina de los años 50.
Tras ganar en 2008 la Palma de Oro en el festival de Cannes con "La clase" (Entre les murs), sobre una conflictiva escuela francesa, Cantet vuelve a abordar un tema al que tiene especial apego.
"La adolescencia me parece un momento muy decisivo y muy rico para la existencia", admite el director, que adaptó la novela de la estadounidense Joyce Carol Oates "Foxfire: Confessions of a Girl Gang".
"Para mí esta película es efectivamente una continuación", reconoció. "Tengo la impresión de no haberla filmado de forma muy diferente a 'La clase'" y "los temas son también un poco comparables: cómo se hace siendo adolescente para entender el mundo", afirmó.