En una rueda de prensa en el Museo del Erotismo de la capital francesa, el jurado de este Festival de cortometrajes (SIPFF) -que nació en Melbourne, hace un par de años, y que ahora tiene ediciones en Los Angeles, Nueva York y París- se vio en dificultades para definir la palabra "sexy".
"Sexy quiere decir algo distinto para cada persona", reconoció la directora del Festival, la australiana Natalie Vella, que subrayó que ese término "no tiene nada que ver con pornografía".
"Sexy es sexo con poesía", afirmó el director de cine y teatro argentino Oscar Sisto, quien es uno de los miembros del jurado de este Festival, que está presidido por el actor, realizador y productor francés Laurent Bouhnik.
"Para mí, sexy es lo que me hace fantasear, lo que me provoca ese cosquilleo especial, y hace que los ojos se me abran con ganas y curiosidad", dijo a la AFP la actriz argentina Mariana Baum, la única mujer miembro del jurado, que incluye a varios cineastas franceses.
"¿Por qué, habiendo ya tantos festivales de cine, en los que el sexo es siempre uno de los temas principales, se necesita uno exclusivamente consagrado al cine sexy?", se preguntó en la conferencia de prensa.
Porqué "el sexo está en todas partes, pero cada vez menos en el cine", aseguró el presidente del jurado, estimando que "cada vez hay más hipocresía y censura, y cada vez se oculta más la sexualidad en el cine".
"Y pese a que muchos creen lo contrario, en Francia los filmes que encaran la sexualidad de frente son muy raros", agregó el realizador de una decena de filmes galardonados, entre ellos "Select Hotel" y "24 horas en la vida de una mujer".
Bouhnik, que acaba de terminar "Q", que trata sobre el deseo y el sexo en la juventud francesa, contó que esa película se ha enfrentado a muchos problemas con la censura. "¿Porqué tienen miedo de un filme sobre el amor, que muestra el amor?", preguntó.
"Los problemas de la censura del sexo en el cine empezaron con las primeras películas de Tarzán", lanzó otro miembro del jurado, que afirmó que "actualmente la norma moral dominante en el cine está contra el sexo".
"Pero el sexo siempre ha estado presente, en la vida, en el arte, se ve en los dibujos de la Grecia de Aristófanes", dijo Oscar Sisto, estimando que "el sexo y la política es lo único que de verdad excitan al pueblo".
"Y no sólo a los políticos", agregó el director de teatro argentino, que contó a la AFP que además de ver cine sexy este fin de semana pondrá los últimos detalles a una obra sobre San Francisco de Asis que va a llevar en gira a Líbano.
"Este festival existe porque hay festivales de cine erótico, y también de cine pornógrafico, pero no de cine sexy, que es algo muy distinto", concluyó Vella, quien visionó unos 200 filmes para definir el programa del Festival, que este año no incluye ni un solo filme de América Latina o España.
En la la competencia de cortometrajes internacionales figuran filmes del Reino Unido, Estados Unidos, Alemania, Canadá, Japón, Irlanda, Grecia, Holanda e Israel.
El capítulo parisino de este Festival internacional, que se celebra en el Cine Nuevo Latina, incluye una sección consagrada a cortometrajes franceses, con diez películas en la competencia oficial.