Fracasa en Túnez negociación para resolver crisis
AFP (Agencia France-Presse)
TÚNEZ. - La primera ronda de negociaciones entre el gobierno islamista y el mediador, un sindicato, para superar la crisis política que sacude a Túnez se saldó este lunes sin ningún avance, aunque se prevé que vuelvan a reunirse esta semana.
Manifestantes en Túnez
Tras cuatro horas de negociaciones, ni el jefe del partido islamista Annahda, Rashed Ghannushi, ni el poderoso sindicato UGTT, Husine Abassi, anunciaron avance alguno que permita esperar una salida negociada de la crisis provocada por el asesinato, el 25 de julio, del diputado Mohamed Brahmi.
Ghannushi habló de un intercambio "positivo y constructivo", pero su interlocutor consideró que "la actitud (de Annahda) no ha cambiado". Las dos partes han previsto un nuevo encuentro esta semana.
La UGTT se ha visto propulsado a desempeñar un papel de mediador entre Annahda y la oposición después de que el presidente de la Constituyente suspendió el martes los trabajos de la asamblea y pidió a la central sindical que asumiera su "papel histórico" apadrinando estas negociaciones.
La oposición y los islamistas tienen posiciones opuestas. Los detractores del poder piden la dimisión del gobierno y la disolución de la Constituyente, que casi dos años después de su elección no ha logrado redactar una Constitución. Annahda rechaza estas reivindicaciones y propone ampliar su coalición con dos pequeños partidos laicos y celebrar elecciones en diciembre.
La UGTT propone por su parte, un gobierno de tecnócratas y que se mantenga la Asamblea Nacional Constituyente.
Sin embargo, tras tres semanas de pulso, no se vislumbra ninguna solución.
Los dos campos prevén grandes manifestaciones este martes con motivo del día de la mujer, que celebra los avances de las mujeres tunecinas, únicos en el mundo árabe y que están en peligro en la nueva Constitución de inspiración islamista.
Por otra parte, seis "terroristas" habrían muerto en la operación militar que se desarrolla en las montañas fronterizas con Argelia, donde un grupo vinculado a Al Qaida y perseguido por el ejército desde diciembre mató salvajemente a ocho militares a finales de julio.