Grecia presiona para recibir ayuda y critica falta de claridad de la UE
AFP, Agence France-Presse
Grecia advirtió el martes que necesita urgentemente que la UE y el FMI liberen los fondos que le prometieron para pagar un importante vencimiento de su deuda el 19 de mayo, pues ya no consigue financiarse en los mercados, en parte por la falta de claridad de la Unión Europea.
El ministro de Economía griego,Papaconstantinou, a la izquierda, habla con el presidente griego, Papandreou
Sin embargo, "dada nuestra incapacidad de acceder a los mercados, el procedimiento tendrá que quedar completado, acordado y firmado en esa fecha, y el préstamo desbloqueado por el FMI y nuestros socios europeos", dijo el ministro, que se expresaba ante los diputados socialistas griegos.
En este contexto, "la situación política de Europa no ayuda", porque, "a menudo, se expresan voces discordantes", y la actitud de Europa "carece de claridad", añadió.
El ministro ya reconoció la víspera que las condiciones en las que Grecia puede pedir dinero prestado en los mercados se han vuelto "prohibitivas", aunque no dijo que su país fuera "incapaz" de hacerlo.
Grecia enfrenta un abultado déficit público, que en 2009 alcanzó el 13,6% del PIB, según la oficina europea de estadísticas Eurostat. No obstante, el ministro advirtió que el dato podría revisarse al alza y situarse en el 14%.
El elevado endeudamiento de Grecia genera fuertes inquietudes en los mercados, que temen que el país, miembro de la zona euro, sea incapaz de reembolsar su deuda.
Este martes, el rendimiento del bono griego a diez años batía un nuevo récord y superaba el 9,5%.
Atosigada por la presión de los mercados, Atenas solicitó el viernes activar el mecanismo de ayuda, que sería por tres años, con un desbloqueo de 45.000 millones de euros (60.000 millones de dólares) en 2010. La UE aportaría dos tercios de ese monto, a una tasa del 5%.
Actualmente, el gobierno griego negocia con la UE, el FMI y el BCE medidas suplementarias de ahorro fiscal para 2011 y 2012, condición indispensable para que su demanda sea satisfecha.
Alemania, que será el principal contribuyente con 8.400 millones de euros, no ha dejado de presionar a Grecia para que presente un plan "creíble" de ajuste fiscal si quiere recibir la ayuda.