Guerrillas colombianas piden adelantar diálogos con toda la insurgencia
AFP (Agencia France-Presse)
BOGOTÁ. - Las principales guerrillas colombianas FARC y ELN consideran necesario "adelantar conversaciones con toda la insurgencia" para lograr una salida pacífica al conflicto armado en Colombia, que se ha extendido por casi 50 años, según un comunicado conjunto difundido este lunes en internet.
En dicha reunión, "además de tratar, reflexionar y superar definitivamente diversos incidentes que condujeron en el pasado a contradicciones, distanciamientos y choques entre las dos fuerzas, abordamos diferentes asuntos de carácter estratégico para el futuro de la nación", agregaron.
En este sentido, resaltaron que "cualquier solución al conflicto interno de nuestro país por las vías del diálogo, pasa por la ineludible necesidad de adelantar conversaciones con toda la insurgencia colombiana", según el comunicado publicado en las páginas "www.eln-voces.com" y "www.farc-ep.co".
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), fundadas en 1964, son la principal guerrilla de Colombia y la más antigua de América Latina, con unos 8.000 combatientes en la actualidad.
El grupo rebelde abrió en octubre de 2012 en Oslo los diálogos de paz con el gobierno del presidente colombiano Juan Manuel Santos, en busca de una salida pacífica al conflicto armado, y en noviembre estos diálogos se trasladaron a La Habana.
Después de diez días de receso programado, este lunes reanudaron los diálogos en La Habana, con el objetivo de abordar el segundo de los cinco puntos de la agenda: la participación política de las FARC. El pasado 26 de mayo ambas delegaciones lograron un acuerdo sobre el problema agrario.
Por otro lado, el Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), con unos 2.500 integrantes, que es la segunda guerrilla de Colombia, ha manifestado su disposición a emprender negociaciones de paz con el gobierno de Santos, que ha condicionado este eventual proceso a la liberación de todas las personas secuestradas.
El ELN mantiene secuestrado desde enero pasado al canadiense Jernoc Wobert y desde mayo pasado al cabo del Ejército Carlos Fabián Huertas.
El conflicto armado de Colombia, en el que también han participado grupos paramilitares de derecha y organizaciones de narcotraficantes, ha dejado más de 3,7 millones de desplazados, 600.000 muertos y 15.000 desaparecidos a lo largo de casi 50 años.