Irán pone condiciones previas a una reunión con Trump
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Teherán. - Irán condicionó un eventual encuentro del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con los líderes iraníes a que Washington revise su salida del acuerdo nuclear y levante las nuevas sanciones impuestas al país persa.
"La vuelta al acuerdo nuclear, el fin de las hostilidades y respeto para el pueblo iraní (...) y entonces se podrá allanar el camino a una salida del dilema actual", escribió en Twitter Hamid Abutalebi, uno de los asesores del presidente Hassan Rohani.
Trump y la cúpula iraní habían intercambiado en los últimos días amenazas. El lunes, sin embargo, el presidente estadounidense se declaró sorpresivamente dispuesto a reunirse sin condiciones previas con Rohani.
"Creo que es lo apropiado...sin condiciones", había asegurado Trump en la Casa Blanca al recibir al primer ministro italiano, Giuseppe Conte. "Si se quieren reunir, me reuniré cuando quieran", agregó. "Me encontraré con cualquiera".
Trump señaló que es posible alcanzar un acuerdo atómico sensato con Irán y apuntó: "(Sería) bueno para ellos, bueno para nosotros y bueno para el mundo". El acuerdo del que se salió Estados Unidos en mayo fue "un desperdicio" de papeles, sentenció.
El presidente iraní no se pronunció al respecto, pero el tema generó hoy un fuerte debate en el Parlamento de Teherán. "Hablar ahora con Trump sería una una capitulación humillante", dijo el vicepresidente del Parlamento, Ali Motahari.
El diputado Heshmat Fallahatpisheh, que forma parte del Comité de Exteriores, era sin embargo de otra opinión. "Las conversaciones Irán-EEUU no deberían ser un tema tabú por principio", afirmó, aunque reconoció que el camino es "difícil y pedregoso".
El propio secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, relativizó las declaraciones de Trump y planteó condiciones para la celebración de un encuentro.
Según Pompeo, Trump está dispuesto "a sentarse y conversar" con los iraníes si estos se comprometen "a hacer cambios fundamentales en la forma en la que tratan a su pueblo", ponen fin a su comportamiento "maligno" en Oriente Medio y se muestran dispuestos a alcanzar un acuerdo nuclear que "realmente prevenga la proliferación".
Según el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Trump, Garrett Marquis, Estados Unidos está dispuesto a poner fin a las sanciones a Irán y a retomar las relaciones diplomáticas y económicas si el Gobierno iraní cambia su comportamiento. "Hasta entonces la dureza de las sanciones será más dolorosa si el régimen no cambia su rumbo", advirtió.
El acuerdo atómico alcanzado en 2015 tenía como fin evitar que Irán fabricara bombas atómicas. A cambio de una flexibilización de las restricciones económicas y más inversiones por parte de empresas extranjeras, Irán se había declarado dispuesto a desmantelar en parte su programa atómico y a someterse a inspecciones internacionales.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha asegurado que el país persa ha cumplido con las condiciones. Pero Trump decidió retirar a Estados Unidos del pacto en mayo y anunció nuevas sanciones contra Teherán que podrían salpicar también a las empresas europeas si operan en Estados Unidos y hacen negocios con Irán.
En ese contexto, Francia espera que Washington emita una autorización que le permita suministrar aviones a Irán, de cara a una entrega prevista de ocho aparatos del fabricante franco-italiano ATR, con sede en Toulouse.
"Negocio desde hace semanas con mi homólogo, el secretario de Finanzas estadounidense Steve Mnuchin (...) y esperamos concesiones por parte de Estados Unidos", informó hoy el ministro de Finanzas galo, Bruno Le Maire, a las emisoras BFMTV y RMC.
Especialmente se trata del suministro de aviones para el transporte regional de pasajeros de la empresa comunitaria ATR, en la que participan las fabricantes europea Airbus y la italiana Leonardo, según sus datos.
Trump y la cúpula iraní habían intercambiado en los últimos días amenazas. El lunes, sin embargo, el presidente estadounidense se declaró sorpresivamente dispuesto a reunirse sin condiciones previas con Rohani.
"Creo que es lo apropiado...sin condiciones", había asegurado Trump en la Casa Blanca al recibir al primer ministro italiano, Giuseppe Conte. "Si se quieren reunir, me reuniré cuando quieran", agregó. "Me encontraré con cualquiera".
Trump señaló que es posible alcanzar un acuerdo atómico sensato con Irán y apuntó: "(Sería) bueno para ellos, bueno para nosotros y bueno para el mundo". El acuerdo del que se salió Estados Unidos en mayo fue "un desperdicio" de papeles, sentenció.
El presidente iraní no se pronunció al respecto, pero el tema generó hoy un fuerte debate en el Parlamento de Teherán. "Hablar ahora con Trump sería una una capitulación humillante", dijo el vicepresidente del Parlamento, Ali Motahari.
El diputado Heshmat Fallahatpisheh, que forma parte del Comité de Exteriores, era sin embargo de otra opinión. "Las conversaciones Irán-EEUU no deberían ser un tema tabú por principio", afirmó, aunque reconoció que el camino es "difícil y pedregoso".
El propio secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, relativizó las declaraciones de Trump y planteó condiciones para la celebración de un encuentro.
Según Pompeo, Trump está dispuesto "a sentarse y conversar" con los iraníes si estos se comprometen "a hacer cambios fundamentales en la forma en la que tratan a su pueblo", ponen fin a su comportamiento "maligno" en Oriente Medio y se muestran dispuestos a alcanzar un acuerdo nuclear que "realmente prevenga la proliferación".
Según el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Trump, Garrett Marquis, Estados Unidos está dispuesto a poner fin a las sanciones a Irán y a retomar las relaciones diplomáticas y económicas si el Gobierno iraní cambia su comportamiento. "Hasta entonces la dureza de las sanciones será más dolorosa si el régimen no cambia su rumbo", advirtió.
El acuerdo atómico alcanzado en 2015 tenía como fin evitar que Irán fabricara bombas atómicas. A cambio de una flexibilización de las restricciones económicas y más inversiones por parte de empresas extranjeras, Irán se había declarado dispuesto a desmantelar en parte su programa atómico y a someterse a inspecciones internacionales.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha asegurado que el país persa ha cumplido con las condiciones. Pero Trump decidió retirar a Estados Unidos del pacto en mayo y anunció nuevas sanciones contra Teherán que podrían salpicar también a las empresas europeas si operan en Estados Unidos y hacen negocios con Irán.
En ese contexto, Francia espera que Washington emita una autorización que le permita suministrar aviones a Irán, de cara a una entrega prevista de ocho aparatos del fabricante franco-italiano ATR, con sede en Toulouse.
"Negocio desde hace semanas con mi homólogo, el secretario de Finanzas estadounidense Steve Mnuchin (...) y esperamos concesiones por parte de Estados Unidos", informó hoy el ministro de Finanzas galo, Bruno Le Maire, a las emisoras BFMTV y RMC.
Especialmente se trata del suministro de aviones para el transporte regional de pasajeros de la empresa comunitaria ATR, en la que participan las fabricantes europea Airbus y la italiana Leonardo, según sus datos.