"La FIDH y la Coordinación Colombia Europa Estados Unidos instan la CPI a la apertura de una investigación por crímenes de lesa humanidad cometidos en Colombia", dijeron las dos organizaciones no gubernamentales en un comunicado.

Las ejecuciones extrajudiciales cometidas en Colombia, conocidas como falsos positivos, constituyen crímenes de lesa humanidad" y sus responsables no han sido investigados, dijeron las dos organizaciones, que presentaban este martes en La Haya un informe titulado "La Guerra se mide en litros de sangre".

En su informe, la FIDH y la CCEEU destacan el carácter "sistemático y generalizado" de las ejecuciones extrajudiciales de más de 3.000 civiles por el ejército colombiano entre 2002 y 2008 para luego presentarlos como "dados de baja en combate".

El objetivo de estos crímenes era presentar buenos resultados en la lucha contra la guerrilla, según las dos ONG.

"Estos actos estaban apoyados por los más altos mandos del Ejército, quienes no solo no ejercieron el necesario deber de control sino que promovieron estos hechos", añade el comunicado.

En 2006, la oficina del fiscal de la CPI anunció un "examen preliminar" sobre la situación en Colombia para determinar si era necesario abrir una investigación por la incapacidad de la justicia colombiana para juzgar crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra o actos de genocidio.

Según la FIDH y la CCEEU existen carencias en Colombia "ya que no se inician investigaciones contra los altos mandos militares responsables de las ejecuciones".

La FIDH también indicó haber transmitido al despacho del fiscal una lista confidencial con el nombre de los principales presuntos autores de esos crímenes.

Las FARC son la principal guerrilla de Colombia, con más de 45 años de lucha armada y unos 9.200 combatientes.