La UE, frente a la difícil elección de una forma de vida más 'verde'
AFP (Agencia France-Presse)
BRUSELAS, Christian Spillmann, (AFP) - La Unión Europea se ha comprometido a promover un modo de vida y un sistema productivo más "verde" de aquí a 2050 para mitigar el calentamiento del planeta, pero pasar de las promesas a los hechos se anuncia doloroso y obligará a los dirigentes a hacer elecciones políticamente difíciles.
"Es el inicio de un trabajo de preparación ambicioso, de grandes proporciones y va imponer grandes decisiones en materia de tecnologías", explicó un negociador europeo.
Este documento sigue al plan de inversiones de "mil millones de euros" del comisario de Energía, Gunther Oettinger, para reemplazar al petróleo. Se complementará con una serie de medidas para reducir las emisiones de C02 en los transportes y una tasa sobre el CO2 que tendrá en cuenta la eficacia energética y la contaminación. Afectará a la gasolina, el diésel, el gas, el petróleo y el carbón.
La hoja de ruta elaborada por Hedegaard desglosa los esfuerzos a llevar a cabo y propone las etapas para el periodo 2020-2050. Las necesidades financieras se estiman en 270.000 millones de euros por año.
La UE se ha comprometido a reducir sus emisiones de gas de efecto invernadero entre 80 y 95% con respecto a los niveles de 1999 para el 2050 para contribuir a limitar el calentamiento del planeta a 2 grados Celsius.
Este esfuerzo debe ser realizado "por la UE, en la UE", insiste la comisaria, quien advirtió que no vale eludir este compromiso financiando proyectos verdes en el extranjero.
Los Estados europeos han alcanzado prácticamente sus objetivos de reducir sus emisiones en un 20% para el 2020 gracias a las limitaciones impuestas a la industria pesada y a los productores de electricidad.
Pero las próximas etapas se anuncian más delicadas, ya que el esfuerzo esencial se concentrará en las categorías de contaminadores hasta ahora poco implicados: la agricultura, la construcción y el transporte, que tendrán que reducir sus emisiones hasta 49%, 91% y 67%, respectivamente.
Estos sectores representan el 60% de los 4,9 millones de toneladas de CO2 que la UE emite cada año. Hasta ahora contribuyen a estos esfuerzos de manera voluntaria, lo que no funciona, se lamenta la Comisión, que quiere hacer obligatorio el cumplimiento para el 2013.
Las amenazas también afectan a la reducción de energía, ya que Bruselas se comprometió a reducir el 20% para 2020, pero el esfuerzo apenas llega al 10%, deploró el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
Los gobiernos rechazan la coacción como forma de proceder.
Dentro de la propia Comisión, algunos se resisten. Así, Oettinger advirtió el domingo contra los objetivos ambiciosos de la Comisión Europea.
"Yo creo que el 20% es la vía media ideal. Las federaciones alemana y europea de la industria, a las que pertenecen también las firmas especializadas en técnicas medioambientales, advierten claramente contra una baja del 30% si Europa es la única en hacerlo", declaró en un diario alemán.
La manera de "reverdecer" tal como la conciben los gobiernos hace palidecer a los ecologistas, convencidos de que las energías renovables van a sustituir al petróleo.