AFP (Agencia France-Presse)
Tallin, Estonia. - La formación gobernante en Estonia, el Partido de la Reforma, ganó este domingo las elecciones legislativas en Estonia, constituyéndose como la fuerza más votada aunque sin autonomía para formar gobierno, tras unos comicios marcados por el miedo a una posible amenaza de Moscú.
Tras la publicación del recuento completo de los votos, se espera que el presidente encargue al primer ministro saliente, Taavi Roivas, que forme gobierno tras haber obtenido 30 escaños de un total de 101, por delante del partido prorruso Centro, que obtuvo 27 representantes. Los socialdemócratas aliados de Reforma se quedaron con 15 parlamentarios y los conservadores de IRL con 14
Con estos resultados definitivos publicados por la Comisión Electoral, la coalición de centro-izquierda gobernante deberá buscar otro socio.
"Se puede decir que el Partido de la Reforma está en posición de formar un gobierno", dijo a la AFP Ahto Lobjakas, editorialista del diario local Postimees.
Sin embargo, el analista dijo que las negociaciones para formar una coalición se proyectan más complejas, con alianzas por un lado con los socialdemócratas y por otro, con los conservadores de IRL.
- Tensión en la frontera con Rusia -
Con una tasa de participación de 63,7% de la población, el Partido del Centro, la formación prorrusa, subió en un escaño su representación, en unos comicios muy marcados por el miedo a una posible amenaza de Moscú.
La anexión de Crimea y los movimientos rusos en Ucrania son seguidos con lupa en esta antigua república soviética, divorciada de la URSS en 1991, de 1,3 millones de habitantes, de los que un cuarto son rusohablantes. El país es miembro de la OTAN, de la Unión Europea y también de la zona euro.
Los ejercicios militares rusos en la frontera estonia pocos días antes de las elecciones redoblaron temores de que el Kremlin desestabilice a los antiguos miembros de la difunta Unión Soviética.
En este sentido, el Partido Centro se afianzó como opción política, aunque sin posibilidades de gobernar en solitario, durante la campaña con apoyo de la minoría rusohablante.
Sin embargo, la figura del líder del Centro, Edgar Savisaar, primer jefe de gobierno tras el desmoronamiento de la URSS, genera ambivalencia y su popularidad se hundió el pasado año tras su polémica visita a Moscú donde dijo que aprobaba la anexión de Crimea por Rusia.
- Orientación europea -
"La situación de la seguridad se perpetuará durante mucho tiempo", advirtió antes de los comicios el primer ministro en referencia a las tensiones regionales. "No sólo se trata de mal tiempo, es un cambio climático", aseguró.
El jefe de gobierno más joven de la UE - tiene 35 años- ha sumado su voz a la de sus homólogos letón y lituano para reclamar mayor presencia de la OTAN, en particular aérea, para responder a la del ejército ruso en las cercanías de sus fronteras.
En este contexto, la Alianza anunció la creación de una fuerza "Punta de lanza" de 5.000 hombres y seis centros de mando en la región, uno de ellos en Estonia.
Para Lobjakas, la entrada del grupo conservador por la derecha podría acentuar aún más la orientación prooccidental de Estonia, fortaleciendo su compromiso con la UE y el OTAN.
Los problemas sociales, como el proyecto de introducir un salario mínimo de 1.000 euros y rebajar las cotizaciones a la seguridad social, han suscitado fuertes debates en la campaña electoral, en el país que sigue con firmeza la pauta europea de una mayor austeridad del gasto.
"Creo que hay cosas mucho más importantes que preocuparse por Rusia", dijo a la AFP Eve Tonisson, una estudiante de 18 años que votó en Viimsi, una localidad del norte de Tallin.
"Mucha gente joven se tiene que ir en busca de salarios mas altos (...) personalmente no creo que me quede en Estonia", afirmó la joven, en referencia a los problemas geográficos que afectan al pequeño país.
El país, que se unió al euro en 2004, registró un crecimiento económico de 1,8% en 2014, con una expansión de la actividad proyectada en 2,5% para este año, con una tasa de desempleo en torno al 7%.