La derecha italiana y el Vaticano avanzan en su guerra contra la píldora abortiva
Publico, Madrid, España
Una comisión especial del Parlamento italiano llevará a cabo una investigación sobre la píldora abortiva RU486, cuya comercializción en Italia fue aprobada hace pocos meses por la Agencia italiana del Fármaco.
Los sectores más conservadores rechazan la venta de este producto en las farmacias italianas debido a sus efectos abortivos y a las consecuencias negativas que puede tener para la salud de la mujer.
Aprobación
Italia aprobó el pasado julio el uso de la píldora abortiva RU-486 que, tras superar todos los trámites burocráticos necesarios para su comercialización, puede ser distribuida en los hospitales de ese país y podrá utilizarse para interrumpir el embarazo hasta las 7 semanas de gestación. Su aprobación como método de interrupción del embarazo recibió el sí definitivo por parte de la Agencia italiana de Fármacos (Aifa) a finales de julio. La agencia ha evaluado la introducción de este sistema durante casi dos años, aunque ya ha recibido las primeras críticas por parte del Vaticano.
Monseñor Giuglio Sgreccia, presidente emérito de la Academia para la Vida, condenó el uso de la RU-486 al calificarla de "veneno letal y no un fármaco", así como "un pecado y un delito" y señaló que su uso o su prescripción comporta la "excomunión" de la Iglesia.
La píldora abortiva permite interrumpir embarazos sin intervención quirúrgica. El primer país que aprobó su uso fue Francia, en 1989, seguido de Australia, China y la India. En España su utilización es legal desde febrero de 2000.