AFP (Agencia France-Presse)
Beirut, Líbano. - La oposición siria en Alepo rechazó este domingo el plan de paz de la ONU para un alto el fuego en la ciudad, asestando un golpe al intento de mediación internacional. Los grupos de la oposición nunca han querido negociar con el gobierno, excepto en Ginebra, hace un año, por poco tiempo.
"Rechazamos reunirnos con Staffan de Mistura si no es sobre la base de una solución global del drama sirio, que pasa por la marcha de (el presidente Bashar Al) Asad y su estado mayor, así como por el juicio a sus criminales de guerra", afirmó la Comisión de fuerzas de la revolución de Alepo, recientemente conformada.
Después de que de Mistura acordara el sábado con el ministro de Relaciones Exteriores sirio, Walid Muallem, enviar una delegación a Alepo, con el objetivo de evaluar la situación, asegurar la llegada de ayuda humanitaria y vigilar el cumplimiento de un eventual cese el fuego, sus esfuerzos recibieron un duro rechazo de la oposición.
Esta comisión se había constituido el sábado en Kilia, una localidad en la frontera con Turquía, tras una reunión que congregó a opositores políticos, rebeldes y miembros de la sociedad civil de Alepo, en presencia del líder en el exilio Jaled Hoja.
Según la comisión, las propuestas de Mistura "no están a la altura de una solución a la crisis humanitaria", que sufre el pueblo sirio, golpeado por armas químicas, además de bombas de barril, prohibidas por la comunidad internacional.
El delegado de la ONU, nombrado en julio, eligió una estrategia opuesta a la utilizada por su predecesores desde el inicio del conflicto interno en Siria en 2011, decantándose por una diplomacia de pequeños pasos.
Su propuesta era lograr una tregua provisional, que permitiría la entrada de ayuda humanitaria en Alepo, antigua capital económica, cortada en dos desde julio de 2012, con barrios controlados por el régimen en el oeste y sectores tenidos por los rebeldes en el este.
A mediados de febrero, De Mistura afirmó que el régimen sirio está dispuesto a suspender los ataques aéreos y los disparos de artillería contra Alepo durante seis semanas para permitir un alto el fuego localizado.
Sin embargo, la oposición se encuentra irritada por las recientes declaraciones del mediador, que dijo el 13 de febrero en Viena que el presidente sirio "es parte de la solución".
- De Kobane al Éufrates -
"Las ideas y las declaraciones de Mistura van en contra de las resoluciones internacionales ya adoptadas que estipulan que se instale un poder ejecutivo interino y la salida de Asad", dijo el comunicado de la oposición, en alusión a la declaración de Ginebra en 2012.
Frente a la idea de Mistura de comenzar un alto el fuego en Alepo, para extenderlo después a otras zonas, la oposición afirmó que "Siria y su pueblo son indivisibles" y señaló además que la "sangre" de sus hermanos en Deraa (sur), en Ghouta (provincia de Damasco) y en Homs (centro), no es menos importante que "la sangre de Alepo".
En tanto, en el norte del país, las fuerzas kurdas retomaron 296 de las 350 localidades situadas cerca de Kobane, que habían caído bajo el control de los yihadistas de Estado Islámico (EI) en septiembre, dijo el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
La principal milicia kurda Unidades de protección (YPG), controla toda la región al oeste de Kobane hasta el rio Éufrates, en la frontera con Turquía, pero los combates persisten en el este del país y en el sur, afirmó la ONG.
En tanto, este domingo de Mistura visitó un convento asirio cerca de Damasco para expresar su solidaridad con esta comunidad cristiana duramente golpeada esta semana por el conflicto después de que 220 fieles fueran secuestrados por el grupo yihadista EI.
Este domingo, una organización humanitaria asiria con sede en Suecia informó que 19 cristianos de esta corriente fueron liberados por EI.