Los palestinos boicotean productos de las colonias israelíes
AFP, Agence France-Presse
Las aduanas palestinas decomisan y destruyen centenares de toneladas de productos procedentes de las colonias israelíes, en el marco de un boicot promovido por el primer ministro palestino Salam Fayad para obstaculizar el desarrollo de esas implantaciones.
"Es nuestro deber vigilar y decomisar todos los productos provenientes de las colonias, en conformidad con la decisión gubernamental" explicó Fadi Abu al-Qurn, un oficial de aduanas palestinas de Ramalá (Cisjordania).
"Este trabajo está dando sus frutos pues hemos confiscado cientos de toneladas de productos", aseguró presentando cajas de vino, de aceite de oliva y otros productos de la colonias judías destinados al mercado palestino.
La Autoridad palestina, que lanzó esta campaña a fines de 2009, colocó afiches a la entrada de Ramalá llamando a los palestinos a participar: "No destruyáis los campos de refugiados construyendo colonias", proclaman.
También creó un portal internet en árabe y en inglés en la cual se describen los productos boicoteados.
De su lado, la aduana está encargada de decomisar todo lo que viene de las colonias e implantaciones israelíes.
Según Abu al-Qurn, en un primer momento los comerciantes palestinos rechazaron cooperar, "pero, después de un tiempo, comprendieron por qué esos productos eran boicoteados".
Casi medio millón de israelíes vive en más 120 colonias establecidas por la fuerza por Israel en el territorio palestino de Cisjordania ocupado y en Jerusalén Este anexado.
Algunas de dichas colonias se han convertido en pequeñas ciudades implantadas con sus barrios residenciales y zonas industriales.
Los palestinos temen que éstas impidan el establecimiento de un Estado independiente y viable y es por eso que la Autoridad palestina insiste en la suspensión de la colonización antes de volver a la mesa de negociaciones.
La campaña de boicot lanzada por Salam Fayad, que supervisa regularmente la destrucción de productos, forma parte de su proyecto para establecer las instituciones de un Estado palestino de aquí a mediados de 2011.
De todas maneras es difícil medir su impacto sobre las colonias, cuyos productos son principalmente destinados a los mercados israelíes y extranjeros.
La Unión europea ha excluido los productos de las colonias de un acuerdo de libre comercio concluido con Israel, pero no es fácil determinar el origen de los productos y hacer la distinción entre los que vienen de Israel y los de las implantaciones.
Hay quienes argumentan que el boicot afectará sobre todo a los palestinos que trabajan en las colonias, en el sector de la construcción y de la industria, donde los salarios son el doble de los del lado palestino.
Por su parte, los colonos judíos atacan lo que los más extremistas califican de "terrorismo económico".
"Los palestinos tienen que elegir. Si no quieren relaciones comerciales y económicas con Israel, entonces no habrá", amenazó Uri Ariel, diputado del partido de extrema derecha Unión nacional.
Entre tanto, los agentes de Fadi Abú al Qurn siguen interceptando los camiones, con gran sorpresa de los choferes palestinos, más acostumbrados a ser detenidos por el ejército y la policía israelí.
"Pienso que debería prohibir todos los productos israelíes, no sólo los que vienen de las colonias", estimó Fadi Abú al Zalf, un camionero interceptado por las aduanas volantes.