Los rebeldes tuaregs de Malí avanzan hacia la paz
AFP (Agencia France-Presse)
Argel, Argelia. - Los rebeldes tuaregs de Malí firmaron este jueves en Argel un acuerdo provisional de paz y reconciliación para su país, pero reclamaron nuevas negociaciones antes de rubricar un acuerdo definitivo para acabar con la violencia.
El gobierno de Malí y grupos rebeldes del norte ya habían firmado el 1 de marzo, en Argel, ese documento que prevé la creación de asambleas regionales con mayores poderes, así como una mayor representación de las poblaciones del norte en las instituciones nacionales.
Los representantes de la Coordinación de los Movimientos del Azawad (CMA), que reúne a varios grupos rebeldes de mayoría tuareg, añadieron este jueves su rúbrica al texto, pero dejaron claro que no firmarán un acuerdo definitivo si no se negocian sus demandas.
"La mediación (argelina) se ha comprometido, tras la firma, a que se discutan nuestras peticiones" sobre aspectos políticos y de seguridad, dijo a la AFP un miembro de la CMA, Sidi Brahim Uld Sidat.
La CMA exige, entre otras cosas, "el reconocimiento oficial del Azawad -el nombre con el que los rebeldes designan el norte de Malí- como una entidad geográfica, política y jurídica" y la creación de una asamblea interregional en esa región.
El acuerdo que propone Bamako no acepta, sin embargo, ningún tipo de autonomía o federalismo y sólo reconoce al "Azawad" como una "realidad humana", sin contenido político.
La comunidad internacional intenta convencer a parte de los rebeldes tuaregs de firmar un pacto definitivo el viernes en la capital maliense, a pesar de las repetidas violaciones del alto el fuego que se registraron en las últimas semanas.
La diplomacia argelina, que supervisa las negociaciones, indicó tras la ceremonia que el presidente maliense, Ibrahim Boubacar Keïta, se mostró dispuesto a recibir a los rebeldes "en cualquier momento para abordar con ellos el futuro del país, de las regiones del norte y la aplicación rigurosa del acuerdo".
En la primavera de 2012, varios grupos yihadistas vinculados a Al Qaida se adueñaron del norte de Malí, aprovechando la derrota del ejército frente a los tuaregs, a los que consideraban como sus aliados antes de expulsarlos de la región.
En enero de 2013, una operación militar encabezada por Francia consiguió expulsar parcialmente a los yihadistas, pero extensas zonas de Malí siguen escapando al control del poder central.
Los representantes de la Coordinación de los Movimientos del Azawad (CMA), que reúne a varios grupos rebeldes de mayoría tuareg, añadieron este jueves su rúbrica al texto, pero dejaron claro que no firmarán un acuerdo definitivo si no se negocian sus demandas.
"La mediación (argelina) se ha comprometido, tras la firma, a que se discutan nuestras peticiones" sobre aspectos políticos y de seguridad, dijo a la AFP un miembro de la CMA, Sidi Brahim Uld Sidat.
La CMA exige, entre otras cosas, "el reconocimiento oficial del Azawad -el nombre con el que los rebeldes designan el norte de Malí- como una entidad geográfica, política y jurídica" y la creación de una asamblea interregional en esa región.
El acuerdo que propone Bamako no acepta, sin embargo, ningún tipo de autonomía o federalismo y sólo reconoce al "Azawad" como una "realidad humana", sin contenido político.
La comunidad internacional intenta convencer a parte de los rebeldes tuaregs de firmar un pacto definitivo el viernes en la capital maliense, a pesar de las repetidas violaciones del alto el fuego que se registraron en las últimas semanas.
La diplomacia argelina, que supervisa las negociaciones, indicó tras la ceremonia que el presidente maliense, Ibrahim Boubacar Keïta, se mostró dispuesto a recibir a los rebeldes "en cualquier momento para abordar con ellos el futuro del país, de las regiones del norte y la aplicación rigurosa del acuerdo".
En la primavera de 2012, varios grupos yihadistas vinculados a Al Qaida se adueñaron del norte de Malí, aprovechando la derrota del ejército frente a los tuaregs, a los que consideraban como sus aliados antes de expulsarlos de la región.
En enero de 2013, una operación militar encabezada por Francia consiguió expulsar parcialmente a los yihadistas, pero extensas zonas de Malí siguen escapando al control del poder central.