La Vanguardia, Barcelona, España
Los vecinos del Raval ya no pueden más, y no se cansan de mostrar a bocajarro la peor cara de un barrio histórico pero profundamente degradado. El barrio barcelonés se ha convertido en céntrico foco de actualidad por las vejatorias condiciones en que se encuentran sus calles, anegadas de suciedad, prostitución, trapicheos, delincuencia y drogadicción.
Pese a la reivindicación constante por una mejora de las condiciones de vida del barrio, la lucha siempre ha chocado con el muro de la desatención, y los vecinos tienen la sensación de haber perdido, una y otra vez, todas las batallas. Las últimas denuncias con pruebas gráficas lanzadas por los vecinos han dado más peso, si cabe, al dicho de 'una imagen vale más que mil palabras'.
En el reportaje "La maldición del Raval" que publica "Magazine" esta semana, los testimonios muestran las heridas abiertas de un barrio que pide a gritos una reconquista en pro del civismo y la dignidad.