Miles de israelíes se manifiestan contra Netanyahu y la corrupción
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Tel Aviv. - Miles de israelíes salieron en la noche del sábado a las calles de Tel Aviv para protestar contra la corrupción y el primer ministro, Benjamin Netanyahu, en el quinto fin de semana consecutivo de manifestaciones.
La radio israelí cifró en unos 4.000 los participantes en la protesta que transcurrió por el bulevar Rothschild.
Netanyahu es acusado de haber aceptado ilegalmente regalos de ricos empresarios y de haber intentado influir en medios de comunicación para evitar informaciones negativas, algo que el jefe de Gobierno rechaza y considera una "caza de brujas" en su contra.
David Amsalem, de la cúpula del partido gobernante Likud, hizo un llamamiento al cese de la "incitación antes de que sea demasiado tarde" y acusó a los manifestantes de querer derrocar el gobierno en lugar de hacerlo por medios democráticos.
Entre las pancartas más llamativas en la noche del sábado se leía una en la que denominaba al primer ministro de "Bodedyahu", en un juego de palabras que significa algo así como "traidor-yahu", según mostraron imágenes de video.
Hace una semana la imitación de una guillotina que llevaba un manifestante en Tel Aviv desató fuertes críticas. El partido Likud lo consideró un llamamiento a la muerte de Netanyahu, haciendo paralelismos con las agresivas manifestaciones de extremistas de derecha que precedieron al asesinato del entonces jefe de Gobierno Izhak Rabin el 4 de noviembre de 1995.
Eldad Janiv, uno de los organizadores de las protestas, rechazó las acusaciones y dijo que se trató de una "pancarta idiota". "No llevaremos ningún ataúd por las calles ni mostraremos a ningún rabino o Bibi (Netanyahu) en uniforme de las SS", dijo a la web "ynet" en referencia a lo ocurrido en 1995. "Lo que hay aquí son patriotas israelíes que quieren recuperar su país".
Netanyahu es acusado de haber aceptado ilegalmente regalos de ricos empresarios y de haber intentado influir en medios de comunicación para evitar informaciones negativas, algo que el jefe de Gobierno rechaza y considera una "caza de brujas" en su contra.
David Amsalem, de la cúpula del partido gobernante Likud, hizo un llamamiento al cese de la "incitación antes de que sea demasiado tarde" y acusó a los manifestantes de querer derrocar el gobierno en lugar de hacerlo por medios democráticos.
Entre las pancartas más llamativas en la noche del sábado se leía una en la que denominaba al primer ministro de "Bodedyahu", en un juego de palabras que significa algo así como "traidor-yahu", según mostraron imágenes de video.
Hace una semana la imitación de una guillotina que llevaba un manifestante en Tel Aviv desató fuertes críticas. El partido Likud lo consideró un llamamiento a la muerte de Netanyahu, haciendo paralelismos con las agresivas manifestaciones de extremistas de derecha que precedieron al asesinato del entonces jefe de Gobierno Izhak Rabin el 4 de noviembre de 1995.
Eldad Janiv, uno de los organizadores de las protestas, rechazó las acusaciones y dijo que se trató de una "pancarta idiota". "No llevaremos ningún ataúd por las calles ni mostraremos a ningún rabino o Bibi (Netanyahu) en uniforme de las SS", dijo a la web "ynet" en referencia a lo ocurrido en 1995. "Lo que hay aquí son patriotas israelíes que quieren recuperar su país".