BILBAO, 2 enero 2010 (AFP) - Anteriormente, un juez de la Audiencia Nacional en Madrid rechazó la petición de una asociación de víctimas de ETA de prohibir la marcha.
Pero precisó que los participantes debían abstenerse de manifestar expresiones de apoyo a ETA, por lo que los manifestantes no mostraron fotografías de miembros de ETA, como lo hicieron en una marcha similar hace un año.
Los manifestantes marcharon el sábado por la capital financiera del País Vasco de forma pacífica y tras una pancarta en la que se podía leer: "Presos vascos a casa" y gritaban "los presos vascos a Euskadi" y "sin amnistía no hay paz".
Los presos de ETA están dispersados en cárceles por toda la geografía española, por lo que sus familiares denuncian las dificultades para poder visitarles.
El viernes, el Tribunal Supremo confirmó una sentencia que anula las ayudas que daba el gobierno regional vasco a los familiares de presos de la organización que estaban encarcelados fuera de su región.
Estas ayudas fueron concedidas entre 2003 y 2009 por el anterior gobierno vasco, del Partido Nacionalista Vasco (PNV, moderado), que gobernó hasta mayo pasado, cuando fue sustituido por el ejecutivo socialista del lehendakari Patxi López.
ETA, considerada una organización terrorista por la Unión Europea y por Estados Unidos, es responsable de 828 muertos desde su creación, hace 50 años, para luchar por la independencia del País Vasco (norte de España).
España elevó el martes su nivel de alerta por terrorismo, al día siguiente de que el gobierno avisara que ETA preparaba un ataque o un secuestro durante los seis meses de presidencia española de la Unión Europea que empezó el viernes.