El Mundo, España
La situación recuerda al ataque suicida que acabó con la vida de dos españoles
MADRID.- Un soldado del ejército afgano ha muerto y otros dos han resultado heridos por disparos de tropas españolas en el sur de Herat, al no atender las indicaciones que se les hicieron para que detuvieran su vehículo cuando se acercaban a un convoy, informaron fuentes del Ministerio de Defensa.
El incidente ocurrió la pasada madrugada, en torno a las seis de la mañana, con muy poca luz. Algunos integrantes del OMLT (instructores españoles del Ejército de Afganistán) estaban dando protección a un convoy afgano que se desplazaba desde Camp Zafra hasta la localidad de Farah.
Al advertir la presencia de un vehículo que iba hacia el convoy, se le hicieron reiterados avisos para que se detuviera en el arcén, pero "de forma imprudente y temeraria", según las fuentes citadas, hizo caso omiso de las señales y los soldados españoles abrieron fuego siguiendo las normas existentes. Posteriormente, se descubrió que el vehículo pertenecía al ejército afgano y pretendía incorporarse al convoy.
Esta situación recuerda a la que tropas españolas vivieron el pasado 9 de noviembre. Entonces la amenaza fue real y tuvo un resultado trágico. Un terrorista suicida hizo estallar su coche contra uno de los seis vehículos blindados que acompañaban a 12 camiones afganos. Murieron dos militares (el cabo primero Rubén Alonso Ríos y el brigada Juan Andrés Suárez) y cuatro resultaron heridos.
Los heridos afganos fueron evacuados al hospital Role-2 de Herat por helicópteros españoles y se encuentran fuera de peligro.
España mantiene en Afganistán un contingente de 778 militares destacados en su mayoría en la Base de Apoyo Avanzado de Herat y en el Equipo de Reconstrucción Provincial Badghis. Desde el despliegue en enero de 2002, un total de 87 militares ha fallecido.