"Miss Bala" lleva a Cannes la violencia y "el olor a miedo" en México
AFP (Agencia France-Presse)
CANNES, Ana María Echeverría, (AFP) - La violencia del narcotráfico en México llegó el viernes al Festival de Cannes de la mano del realizador Gerardo Naranjo, cuya película, "Miss Bala", está impregnada del "olor a miedo" que se percibe en una gran parte de su país.
Stephanie Sigman, en una imagen del film.
Producida por Canana, fundada en 2005 por los actores Gael García Bernal, Diego Luna y Pablo Cruz, la película transporta a la pantalla esta historia contada desde el punto de vista de la joven belleza (Stephanie Sigman) que se ve envuelta, por azar, en el mundo de la criminalidad, que ha convertido a México en un campo de batalla.
"Ella se llama Laura Zúñiga y había sido coronada Miss Sinaloa en el 2008. Al investigar, se supo que ni siquiera había concursado, sino que llegó y la coronaron", dijo Naranjo en una entrevista con la AFP en Cannes.
"Luego vi una foto de ella con su novio: tenía una cara angelical y él era horrible, su rostro expresaba el monstruo que era. Y esa historia me hizo preguntarme cómo una joven como ella termina así", agregó el realizador.
"Me pregunté : qué hace una muchacha guapa del norte (de México). ¿Cómo vive, cuántas cosas puede decidir hacer en su vida? Y es claro que sus opciones son muy limitadas", dijo Naranjo, que en su película "Voy a explotar" (2008), plantea la situación de la juventud mexicana, que no tiene nada por lo cual pelear.
El cineasta subrayó que había hecho un gran esfuerzo para que su filme, en el que Stephanie Sigman refleja toda la tristeza de "Miss Bala", una mujer "cosificada" por ambos bandos -narcos y militares- no se centrara en el fenómeno del narcotráfico en sí, sino en la violencia de México.
Esa violencia "es producto también del tremendo individualismo, de la falta de solidaridad, de la falta de educación, de identidad, de esa concepción de que todos los mexicanos somos chingones", dijo.
"Por eso en ningún momento en la película hay una referencia a la droga. Porque lo que quería era crear un ambiente, una atmósfera, que nos contara ese olor a miedo que se percibe", explicó.
"Quería retratar el caos, la ausencia de orden, la pobreza espiritual y el machismo que prevalece en México, añadió.
"¿De dónde sale ese machismo, esa brutalidad terrible contra la mujer, como la que se ve en Ciudad Juárez?. Creo que oculta un gran miedo a la mujer", dijo el realizador, recalcando que a él no le interesaba meterse en la cabeza de los narcotraficantes.
"No quiero saber su justificación, por qué cometen crímenes. No me interesa si se meten en ese negocio para obtener dinero para una operación de su pequeño hijo que sufre de polio. Lo que quise fue ir conociendo a esas bestias, que no respetan nada, no respetan la vida", agregó.
"Y tuvimos que contenernos, porque el grado de brutalidad al que están llegando los criminales de México sólo tiene parangón con la violencia de los aztecas. Pero en ellos había un orden, en tanto que ahora la cosmogonía se ha perdido", concluyó.
Noe Hernández, el actor que encarna a Lino, el narcotraficante, indicó que Naranjo es un realizador que da mucho campo a sus actores.
"Me dio mucha libertad para crear ese personaje, aunque me dio un marco en el que me podía mover. El requisito es que tenía que huir de los lugares comunes, de los clichés. Por eso vemos a Lino todo el tiempo trabajando, no lo vemos con las drogas", dijo.
La Quincena de los Realizadores, creada por la Sociedad de realizadores de filmes (SRF) después de mayo de 1968, seleccionó también "Días de Gracia", de Everardo Valerio Goult, y "El Velador", otro filme que aborda también el tema del narcotráfico, sin jamás mostrar un gramo de droga.
"El Velador", de la mexicano-estadounidense Natalia Almada, sobre un cementerio dedicado a narcotraficantes, se presentará en sesión especial el próximo martes.