Nigeria: secta islamista Boko Haram quiere imponer un Estado islámico
AFP (Agencia France-Presse)
LAGOS. - La secta islamista radical Boko Haram, que reivindicó los ataques del viernes que dejaron al menos 150 muertos en el noreste de Nigeria, quiere imponer un Estado islámico en esa región, con una estricta aplicación de la sharia, la ley islámica.
Miembros de Boko Haram
Hasta la represión de 2009, los combatientes islamistas estaban activos en su bastión de Maiduguri, capital del Estado de Borno (noreste), cerca de las fronteras con Camerún, Níger y Chad. Desde entonces se ignora en qué lugar establecieron su base.
Boko Haram había lanzado en 2009 una insurrección en Maiduguri liderada por su ex jefe Mohamed Yusuf. La brutal represión del levantamiento por el ejército dejó unos 800 muertos. La mezquita que fue utilizada como cuartel general de la insurrección fue totalmente destruida por las fuerzas de seguridad durante los combates.
A pesar de ello los combatientes islamistas nigerianos continuaron lanzando ataques mortíferos contra responsables de la policía, políticos o responsables comunitarios y religiosos opuestos a su ideología extremista.
Los locales en donde se consume alcohol también están en su mira.
Desde mediados de 2010, la secta amplió su campo de acción. Activa esencialmente en el norte -mayoritariamente de confesión musulmana- del país más poblado de Africa con más de 150 millones de habitantes, pasó a extenderse a otras regiones, en particular en Abuja, la capital federal, en donde atacó el cuartel general de la policía en junio causando dos muertos y la sede de la agencia de las Naciones Unidas en agosto que terminó con 18 muertos.
Boko Haram, cuyo nombre significa en lengua hausa "la educación cristiana es un pecado", quiere un Estado islámico en el norte del país, con una estricta aplicación de la sharia.
El norte es de mayoría musulmana con algunos enclaves cristianos, mientras que en el sur vive una mayoría cristiana.
Los contactos de la secta van más allá de las fronteras de Nigeria. El 15 de junio el movimiento afirmó en un comunicado que ciertos de sus miembros habían recibido una formación militar en Somalia, controlada en parte por los combatientes islamistas Shebab, vinculados a Al Qaida.
Algunos miembros de esta secta también habrían recibido entrenamiento militar en Afganistán y en el Sahel, según expertos en terrorismo.
En sus comienzos, en 2004, Boko Haram estaba compuesta esencialmente por universitarios y personas marginadas de su ambiente social de origen, de la clase alta y media.
Un grupo de unas 200 personas había montado un campamento cerca de la frontera con Níger, en la localidad de Kanamma, en el Estado de Yobe (noreste).
Desde esta base comenzaron a lanzar ataques contra puestos de la policía, a matar uniformados y a robar municiones. Desde esa fecha, y a pesar de la brutal represión del ejército, los combatientes de Boko Haram no censaron de intensificar sus ataques.