AFP (Agencia France-Presse)
BAALBEK. - Ocho personas, entre ellas cinco niños, murieron este viernes por la caída de obuses lanzados desde Siria sobre la localidad fronteriza de Aarsal, en Líbano, según responsables, lo que supone el balance más alto en un ataque de este tipo desde el inicio del conflicto sirio.
Ocho personas murieron y otras 20 resultaron heridas cuando unos obuses lanzados desde el otro lado de la frontera cayeron sobre Aarsal, precisó una fuente de seguridad.
El presidente libanés, Michel Suleimán, pidió al ejército "proteger" las localidades fronterizas de este tipo de ataques.
Un responsable de la ciudad dijo a la AFP que cinco de las víctimas eran niños, y tres de ellos pertenecían a la misma familia.
"Tres de los cinco niños eran de una misma familia libanesa. Hay otro niño, también libanés, y no hemos podido identificar a la quinta víctima, una niña pequeña", precisó Ahmad al Hojairi desde el ayuntamiento de Aarsal.
El ejército libanés explicó que "entre las 10H45 (8H45 GMT) y mediodía (10H00 GMT), 20 cohetes y obuses lanzados desde Siria cayeron sobre las zonas de Ras Baalbek, Al Kawaj, Al Bweida, Masharia al Qaa, Aarsal y Hermel".
En Hermel, bastión del movimiento chiita Hezbolá, que envió a sus hombres a combatir junto a las fuerzas del régimen sirio, un atentado con coche bomba había matado el jueves a tres personas.
El ataque fue reivindicado por un grupo yihadista desconocido hasta entonces que se hace llamar Frente al Nosra libanés.
Aarsal, una localidad libanesa de mayoría sunita y partidaria de la rebelión siria, está cerca de la frontera y sirve de paso para los refugiados, las armas y los rebeldes sirios, informaron fuentes de seguridad. Desde hace un año es blanco de ataques aéreos de las fuerzas del régimen sirio, que afirman que persiguen a los rebeldes.
Líbano está muy dividido sobre el conflicto armado en Siria, sobre todo después de que Hezbolá admitiera públicamente que enviaba combatientes para ayudar al ejército sirio.