AFP (Agencia France-Presse)
BERLÍN. - Alemania se ha lanzado en una ofensiva diplomática tras conocerse que Estados Unidos habría intervenido el teléfono móvil de la canciller Angela Merkel, expresando su decepción por esta nueva faceta de su "amigo estadounidense".
Altos responsables de los servicios secretos alemanes viajarán a Estados Unidos la próxima semana por las sospechas de que Washington espió el teléfono de Merkel, anunció la prensa alemana.
El envío de estos altos responsables, como parte de una delegación, fue anunciado después de que el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle, se reuniera el jueves con el embajador de Estados Unidos en Berlín, tras la revelación de informaciones que decían que EEUU escuchó el móvil de la canciller.
"Representantes de alto rango del Gobierno acudirán rápidamente a Estados Unidos para avanzar en las discusiones con la Casa Blanca y la NSA sobre las alegaciones recientemente mencionadas", dijo el viernes el portavoz adjunto de la canciller, Georg Streiter.
La delegación incluirá a altos responsables de los servicios secretos alemanes, dijo la prensa alemana este sábado, citando a fuentes próximas a los servicios de inteligencia.
La principal misión de esta delegación es obtener respuestas por parte de las autoridades estadounidenses sobre cuestiones que el Gobierno alemán, y en particular los ministerios de Justicia e Interior, ya le habían presentado en el verano boreal, tras las primeras revelaciones del "caso Snowden".
Edward Snowden, exconsultor de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense, comenzó a revelar en junio las operaciones de espionaje electrónico llevadas a cabo a nivel mundial por esta agencia.
Para el Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ), "el frío (presidente estadounidense Barack) Obama que hace discursos tan inteligentes no tiene que negarse a explicar lo que pasó".
Ahora Merkel tiene que obtener un resultado concreto que demuestre que se está haciendo "algo contra la orgía de vigilancia estadounidense", indicó por su parte el Süddeutsche Zeitung (SZ).
En momentos en que la oposición, en particular los Verdes y Die Linke (La Izquierda) acusan a la jefa de gobierno de minimizar el escándalo, el partido socialdemócrata SPD, que está negociando para formar un gobierno con Merkel, barajó la posibilidad de interrumpir temporalmente las negociaciones sobre un posible acuerdo de libre comercio, pero la canciller no apoyó su iniciativa.
Paralelamente, Alemania prepara un proyecto de resolución de la ONU sobre la protección de las libertades individuales junto con Brasil, indicaron fuentes diplomáticas de la organización.
La resolución, que sería presentada a la comisión de Derechos Humanos de la asamblea general de las Naciones Unidas, no mencionará específicamente a Estados Unidos, y buscará extender a las actividades en internet el Pacto Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos aprobado en 1966 por la ONU y que entró en vigor en 1976.
Además de Francia y Alemania, otros países europeos como Bélgica, Italia o España, al igual que Brasil o México, han sido víctimas de las prácticas de la NSA.
Hasta el momento, solo la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que conminó a la administración de Barack Obama a ofrecer explicaciones creíbles, ha ido tan lejos como suspender una visita de Estado a Washington que tenía prevista.
El espionaje acaparó buena parte de las conversaciones de los 28 mandatarios de la Unión Europea a lo largo de dos días de cumbre en Bruselas, concluida este viernes, pero las divisiones persisten.
"A los amigos no se los espía", dijo Merkel en Bruselas, visiblemente indignada.