"Rechazamos todo el proceso electoral y estamos negociando con otros grupos políticos unos nuevos comicios", anunció hoy el portavoz del actual partido gobernante Liga Musulmana de Pakistán (PML-N), Mushahidullah Khan, quien añadió que el PML-N se pondrá en contacto con todas las demás formaciones que no reconocen el resultado electoral y estudiará con ellas cómo proceder.

Ya el viernes por la noche, una alianza de pequeños partidos había exigido la celebración de nuevas elecciones. "Esto es una selección, no una votación", dijo un senador del partido Jamiat Ulema-e-Islam (JUI-F), Hafiz Hamdullah.

El ex deportista profesional de críquet Imran Khan se alzó el viernes como vencedor de las elecciones, aunque sin mayoría suficiente para formar Gobierno en solitario.

Khan calificó las elecciones como las "más justas en la historia" de Pakistán. Sin embargo, prometió que su partido participará en eventuales investigaciones sobre la limpieza de los comicios. También la Comisión Electoral ha rechazado varias veces las acusaciones de manipulación.

Según los resultados oficiales, el Movimiento por la Justicia (Tehreek-e Insaf/PTI) de Khan obtuvo la victoria en 116 de 272 distritos. Para formar un Gobierno de mayoría se necesitan 137 escaños en el Parlamento. El portavoz del PTI, Iftijar Durrani, dijo que los partidos aliados con esta agrupación habían ganado 11 escaños y aseguró que los 13 candidatos independientes colaborarán con el PTI.

El principal rival del PTI, el PML-N, del encarcelado ex primer ministro Nawaz Sharif, obtuvo 64 escaños. El Partido Popular de Pakistán (PPP), del ex presidente Asif Ali Zardari, consiguió 43 bancas. La participación se situó en el 52 por ciento, tres puntos porcentuales menos que en las elecciones de 2013.