Portugal obtiene un año más de plazo para cumplir metas de déficit
AFP (Agencia France-Presse)
LISBOA. - Los acreedores internacionales de Portugal, país de la Eurozona bajo asistencia financiera, le acordaron un año suplementario, hasta 2015, para reducir su deuda pública por debajo del 3% del PIB, un alivio para esta nación que sufre su mayor recesión en 40 años, un desempleo récord y un creciente descontento social.

Manifestación en Portugal contra las medidas de ajuste pactadas.
Las metas del déficit, que ya se habían flexibilizado en septiembre, eran hasta ahora de 4,5% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2013, de 2,5% en 2014 y de 2% en 2015.
El déficit de 2012 fue de 4,9%, indicó Gaspar, dentro del objetivo del 5%. Gaspar precisó que la oficina europea de estadísticas Eurostat se había negado a incluir en el cálculo los ingresos generados por la concesión de los aeropuertos portugueses, con lo que según sus criterios el déficit fue del 6,6%.
Este último examen de la situación portuguesa, iniciado el 25 de febrero, ha sido el más largo y el más difícil desde que la "troika" (UE-FMI y Banco Central Europeo) examina con lupa las cuentas del país.
Como en sus precedentes evaluaciones, la "troika" otorgó al gobierno el visto bueno a sus esfuerzos, abriendo la vía a la entrega de un nuevo tramo de ayuda de 2.000 millones de euros, en el marco de un préstamo total de 78.000 millones de euros.
Es en reconocimiento al "ejemplar resultado" de Portugal que "fue posible revisar los objetivos del déficit", comentó Gaspar.
"La aplicación del programa sigue globalmente en sus márgenes en una coyuntura económica difícil", afirmó por su lado la "troika" en un comunicado.
La deuda pública portuguesa, por su parte, supera el 120% del PIB, pero en este ámbito la "troika" concedió al gobierno hasta 2015 para reducir los gastos públicos en unos 4.000 millones de euros. Originalmente, ese ahorro debía realizarse en 2013 y 2014.
Tras una recesión de 3,2% en 2012, la más grave desde 1975, Gaspar prevé para este año una caída del PIB del 2,3%. En este contexto, el desempleo afecta al 16,9% de la población activa y debería llegar al 18,2% a fin de año, y luego elevarse a 18,5%, una cifra récord, el año siguiente.
La flexibilización de estos objetivos exigidos por la "troika" era reclamada desde hace tiempo por la patronal, los sindicatos y la oposición de izquierda, cuya principal formación, el Partido socialista, incluso abogó por una renegociación del plan de ayuda.