Ocho de los 12 presidentes del ente regional estuvieron presentes en este encuentro celebrado en Georgetown, capital de Guyana, país que asumió la presidencia pro témpore del bloque por un año, de manos de Ecuador.
La cumbre comenzó con un largo y emotivo aplauso en recuerdo del ex mandatario argentino Kirchner, fallecido hace un mes, al que los presidentes de Unasur quisieron rendir homenaje.
"Desde que asumió la secretaría de Unasur, trabajó sin descanso para la aprobación de su Tratado Constitutivo (...) El mejor homenaje es que no haya retorno en este proceso y seguir construyendo una América Latina unida", pidió su viuda, la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner.
Unasur no elegirá finalmente este viernes a un nuevo secretario general para seguir evaluando candidatos que generen el consenso de los países miembros.
"No será hoy (viernes). Tenemos que tantear y conversar. Cuando se creó el cargo de secretario general, quedó claro que tenía que ser un ex presidente de Sudamérica, así que tenemos que consensuar algunos nombres", declaró el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, en una entrevista con la AFP.
Varios nombres se barajan para reemplazar al fallecido ex presidente argentino, como el del ex mandatario uruguayo Tabaré Vázquez o el jefe de Estado brasileño saliente, Luiz Inacio Lula da Silva.
Entre los temas de esta cumbre también está la aprobación de la llamada cláusula democrática, un texto que pretende disuadir cualquier intento de golpe de Estado en la región y establece sanciones para quien quebrante el orden constitucional.
Entre las penalizaciones destacan el cierre de fronteras, limitación de comercio, además de sanciones diplomáticas y políticas.
El borrador del texto fue redactado por Ecuador, que fue escenario de una sublevación policial contra el presidente Rafael Correa en septiembre.
Además, los jefes de Estado subrayaron la necesidad de acelerar mecanismos concretos de integración como la unión energética, obras de infraestructura o una mayor armonización de sus legislaciones.
"La integración de Unasur es la nuestra, la del Sur (...), va más allá de lo común y su principal objetivo es lograr una sociedad mas justa y desarrollada. Queremos una nación sudamericana", pidió Correa, a la hora de hacer un balance de su gestión.
"Nos contemplamos hoy, diversos pero iguales, hemos caminado mucho pero queda todavía mucho camino por recorrer", subrayó.
Ecuador prácticamente logró las nueve ratificaciones al tratado constitutivo de Unasur, necesarias para dar existencia jurídica al bloque, algo que aumentará la legitimidad del ente multilateral y facilitará numerosas tareas. Uruguay se convertirá en el noveno país en aprobar su adhesión en los próximos días.
"El hecho de que hoy tengamos la presidencia pro témpore de Unasur demuestra que el bloque no se basa en alianzas históricas sino que trata igual a países pequeños y grandes", se felicitó Bharrat Jagdeo, presidente de Guyana, pequeño país anglófono del Caribe.
Otro de los momentos más emotivos de la cumbre fue la despedida de Lula da Silva, que asistió en Guyana a su última reunión de Unasur en calidad de presidente, un mes antes de ceder el cargo a su compañera de partido, Dilma Rousseff.
"Me voy satisfecho. Me voy convencido de que conseguimos hacer en estos años lo que varios compañeros intentaron hacer durante décadas y no lo lograron: aprendimos a respetarnos, a convivir democráticamente en la diversidad", se felicitó, provocando un sonoro aplauso en un auditorio en pie.
El carismático mandatario brasileño aseguró que América Latina hoy entra en foros internacionales "con la cabeza erguida" e instó a incrementar la unión para lograr prosperidad.
"Ningún país será verdaderamente próspero si todos no lo somos y Unasur es el futuro", se despidió.